Naciones Construidas sobre Mentiras
Cómo se Enriqueció Estados Unidos
Volumen 1 - Parte 2
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© Larry Romanoff, Octubre, 2021
Traducción: PEC
Parte 1 de 6Colonización, Trabajo y Esclavitud
Contenido Parte 2
Preámbulo
La democracia crea élites ricas, no naciones ricas
El colonialismo: La amarga verdad
Colonización al estilo americano
Cultivando la disparidad de ingresos
La visión estadounidense de la supremacía económica de Estados Unidos en 1948
La visión estadounidense de la supremacía económica de Estados Unidos en 2010
Prerrogativa imperial
El trabajo, la maldición del capitalismo
La esclavitud
Preámbulo
Hay
que tener en cuenta que el contexto general de la riqueza contiene varias
dimensiones distintas que, en su mayoría, se excluyen mutuamente. Un reino
puede ser rico en el sentido de que su monarca posee una gran riqueza y poder,
pero eso no dice nada de los individuos que viven en ese reino, ya que la
riqueza del soberano puede derivar enteramente de habérsela despojado a la
población. La población también se divide en dimensiones en términos de clases
sociales. Toda nación, rica o pobre, tiene una clase alta rica, lo que no nos
dice nada sobre la riqueza relativa de la nación en su conjunto. Si un país tiene
una clase media pequeña y menguante o una parte sustancial de la clase baja que
vive en la pobreza, debemos afinar nuestra comprensión de lo que realmente
significa ser una nación rica. Estos casos, que son indicativos de una gran
disparidad de ingresos y en los que un relativo puñado es rico mientras que la
mayoría no lo es, no cumplirían con nuestra idea de un país rico.
Las
naciones sometidas a un capitalismo no regulado se ajustarán generalmente a la
definición anterior, con una gran disparidad de ingresos que contiene un
relativo puñado de ricos, pero con la pirámide de la riqueza descendiendo muy
rápidamente hacia la pobreza. Un país capitalista no regulado, como los EE.UU.,
bien podría tener gran parte o la mayor parte de esa riqueza residente en sus
grandes corporaciones y sus propietarios de la élite, riqueza que no se filtra
hacia los trabajadores. Como ejemplo podemos pensar en Apple, con unos cuantos
ejecutivos muy ricos y varios cientos de miles de millones no declarados en
paraísos fiscales, pero el trabajador medio de Apple está lejos de ser rico
según la mayoría de las definiciones, y el millón de jóvenes que realmente
fabrican y ensamblan los productos de Apple podrían calificarse como
empobrecidos. Por el contrario, una nación con una tendencia más socialista
tendrá una capa más pequeña de riqueza extrema y un nivel de vida mucho más
alto para todo el resto, con una clase media mucho más grande y poca o ninguna
pobreza.
Entonces,
¿qué queremos decir realmente cuando decimos que un país es rico? ¿Que el
gobierno tiene enormes ingresos o que el soberano tiene una gran riqueza? ¿Que
sus empresas son enormemente rentables y sus banqueros extremadamente ricos? ¿O
queremos decir que todos los habitantes del país, incluidas las clases bajas,
participan de esa riqueza, que nadie vive en la más absoluta pobreza? Al final,
no es la riqueza extrema de unos pocos sino el nivel de vida de toda la
población lo que debemos considerar. Para obtener una apreciación realista de
la riqueza de una nación, debemos examinar no las altas capas de la sociedad,
que siempre son ricas en todas partes, sino la situación de seguridad
financiera de los menos privilegiados de esa sociedad.
En
nuestro ejercicio aquí para examinar cómo se enriqueció Estados Unidos, debemos
tener en cuenta estas dimensiones, porque en todos los ejemplos, excepto en
uno, las actitudes, las acciones y los acontecimientos que contribuyeron a
hacer de Estados Unidos, lo que muchos deciden llamar un país "rico",
se dirigieron exclusivamente al beneficio de la élite estadounidense y
principalmente incluso a ciertos segmentos de esa clase. Si usted es
estadounidense, debería quedarle muy claro al repasar estos acontecimientos que
la determinación casi feroz de hacer rico a Estados Unidos no lo tenía a usted
en mente, y si usted se benefició en algo de esos acontecimientos, eso fue lo
que las élites considerarían un daño colateral y no era en absoluto la
intención.
La
Democracia Crea Élites Ricas, no Naciones Ricas
A
los estadounidenses se les ha inculcado desde su nacimiento la teología de que
su nación es rica porque su democracia proporcionó el semillero de un pueblo
emprendedor, innovador e ingenioso, y sus libertades crearon el combustible
para el motor de la excelencia competitiva estadounidense. Pero si nos quitamos
las gafas de color de rosa y miramos más allá de la propaganda, parece que hay
poco o ningún apoyo basado en la realidad para estas afirmaciones. Ninguna de
ellas aporta razones de peso ni constituye un relato convincente para explicar
la riqueza de Estados Unidos o de las naciones occidentales en general. La
verdad está en otra parte.
A
menudo se nos presenta la afirmación de que las naciones ricas del mundo son
(casi) todas democracias electorales, y esta riqueza nacional se ofrece como
prueba de la superioridad del sistema político. Pero la correlación no es
causalidad, y no hay pruebas que sugieran que la forma estadounidense de
política multipartidista contribuya de forma útil a la riqueza de nadie,
excepto de aquellos que están en posición de aceptar el patrocinio de una u
otra forma. También es cierto que muchas de estas naciones o regiones se
enriquecieron bajo lo que nos gusta llamar gobiernos autoritarios, pasando a
formas alternativas mucho más tarde.
Además,
si la política electoral es una fuerza positiva para la riqueza nacional, esta
fuerza no se distribuye de forma equitativa, ya que podemos encontrar algunos
poderosos ejemplos en su contra. El primero de ellos sería la India, "la
mayor democracia del mundo", que no es precisamente un ejemplo de riqueza
y de éxito. Y de hecho, el mundo posee una abundancia de democracias pobres,
existiendo muchas naciones con una combinación de los atributos básicos del
multipartidismo y un PIB per capita
patéticamente bajo. Las naciones que han abrazado el capitalismo parecen ir
generalmente bien, y parece que si hay alguna correspondencia entre la riqueza
nacional y algún sistema de funcionamiento, ese sistema sería el capitalismo y
no la política electoral.
Colonialismo:
La Amarga Verdad
Por
lo general, parece que se le escapa al público que Estados Unidos y la mayoría
de las demás naciones occidentales tienen en común un rasgo adicional, además
de la política electoral y el capitalismo, y ese rasgo es la colonización.
Estados Unidos y las naciones de Europa Occidental no se enriquecieron por ser
democráticos o capitalistas; adquirieron prácticamente toda su riqueza
depredando y saqueando a todas las naciones más débiles del mundo. Los hechos
son demasiado claros; no hay forma de ocultar esto. El Imperio Británico
prosperó durante siglos invadiendo y saqueando innumerables naciones,
masacrando a incontables millones de personas en el proceso. Los franceses, los
italianos, los españoles, los portugueses, los holandeses, los alemanes, los turcos,
todos hicieron lo mismo. Al igual que los estadounidenses, a su manera.
La
cantidad de documentación existente sobre la violación y el saqueo de estas
naciones probablemente consistiría en una pila que llegaría hasta la Luna. La
lista de los actos inhumanos y bárbaros cometidos por estos colonizadores
probablemente llegaría hasta la Luna ida y vuelta. Si no hubiera sido por la
conquista y la colonización de todas esas naciones en América, en Asia y
África, en Oriente Medio, y el saqueo de sus riquezas, todas esas cacareadas
democracias capitalistas occidentales serían hoy tan pobres como Angola, a
pesar de toda su creatividad, libertad y democracia.
Los
británicos, los europeos y los estadounidenses abordaron los problemas
logísticos de la colonización de forma diferente. Los británicos fueron los más
prácticos en la gestión de sus colonias, mientras que los estadounidenses
encontraron la manera de lograr el mismo resultado por control remoto. Pero los
resultados fueron los mismos: pobreza, miseria y opresión para los vencidos y
colonizados, y una riqueza incalculable para los imperios coloniales. No hay
forma de escapar a esta brutal verdad. El historial de las naciones
occidentales en la deposición de gobiernos y la destrucción de naciones en aras
de su saqueo colonial, debería llevar a los seres humanos pensantes y sensibles
a las lágrimas. La responsabilidad de esta pobreza perpetua recae en las
naciones occidentales que invadieron y colonizaron estos países, despojándolos
de sus riquezas y recursos, y haciéndose inmensamente ricos en el proceso.
Durante más de 100 años, utilizando su ejército y más tarde la CIA, el gobierno
estadounidense instaló dictadores obedientes en docenas de las naciones más
pobres del mundo, mientras las multinacionales estadounidenses extraían cientos
de miles de millones de beneficios de las más escasas inversiones.
No hay forma de evitar el hecho de que una de las
principales causas de la supremacía económica de Estados Unidos en la
actualidad sea su colonización militar y política, el saqueo de las naciones
garantizado por la instalación de brutales dictaduras militares. Unas 50
naciones sufrieron ese destino bajo el disfraz propagandístico de defender la
democracia o de proteger los intereses estadounidenses. Así es como Estados
Unidos se enriqueció. No fue, como cree la mayoría de los estadounidenses, para
ser "libres" o para tener "democracia", o por ser más
inteligentes o más inventivos que otras naciones. Por el contrario, todo se
hizo con la fuerza militar ilegal y violenta, esclavizando virtualmente a
muchas docenas de países como colonias militares brutales, utilizando a esas
naciones como vacas para ordeñar. Estados Unidos simplemente canibalizó a gran
parte del mundo. Como escribió Samuel Huntington en su libro, “El choque de
civilizaciones y la reconstrucción del orden mundial”, "Occidente ganó el
mundo no por la superioridad de sus ideas, valores o religión, sino por su
superioridad en la aplicación de la violencia organizada". Los
occidentales suelen olvidar este hecho; los no occidentales nunca lo
hacen".(1) (2)
Comenzó
con los hermanos Dulles (3) (4) (5) y la United Fruit Company en América Central, (6) (7) (8) (9) con la ITT
ayudando a financiar el derrocamiento de los gobiernos locales, (10) (11) (12) (13) (14) (15),y continuó desde ahí. Toda Sudamérica y
Centroamérica, gran parte de África y Asia, estuvieron expuestas a esta marca
de "libertad y democracia" estadounidense. En la década de 1920, el
gigante minero estadounidense Anaconda era dueño de todo el cobre de Chile -las
minas de cobre más productivas del mundo- y extraía miles de millones en
beneficios mientras que Chile seguía sumido en la pobreza. Cuando Chile actuó
para nacionalizar sus minas de cobre, Estados Unidos envió inmediatamente a la
CIA para asesinar al presidente, derrocar al gobierno e instalar a Augusto
Pinochet como dictador títere, un hombre cuya brutalidad fue legendaria pero
que permitiría a Anaconda continuar con su programa de "saqueo por la
paz".
Durante
muchas décadas, Gran Bretaña, Francia y los Estados Unidos mantuvieron a Irán
prácticamente en la pobreza, despojando a esa nación de todas sus reservas de
petróleo para financiar sus imperios, mientras que no dejaban casi nada para el
propio Irán. (16) (17) (18) (19) (20) Cuando esta nación decidió nacionalizar su industria
petrolera para hacerse cargo de sus propios recursos nacionales, Estados Unidos
envió a la CIA para derrocar al gobierno debidamente elegido de Irán e instaló
al Sha como presidente, uno de los dictadores más brutales e inhumanos que se
recuerdan, pero que permitiría a las naciones imperiales occidentales seguir
saqueando libremente los recursos de Irán. (21) (22) (23) (24) (25) (26) (27) En Zaire, el temor de Occidente a perder el control
de los recursos de oro, diamantes y cobalto, provocó otro derrocamiento
estadounidense, de nuevo por la CIA, esta vez asesinando a otro líder
debidamente elegido e instalando a otro brutal dictador dispuesto a los
sobornos occidentales. (28) (29) (30) Desde la década de 1920 hasta la de 1960, las
compañías petroleras estadounidenses, con constantes intervenciones militares
de Estados Unidos, agotaron todas las reservas de petróleo conocidas de Colombia,
obteniendo miles de millones de beneficios y dejando a la nación sin petróleo
conocido. El presidente estadounidense Coolidge orquestó el derrocamiento del
gobierno de Guatemala tras negarse a otorgar más concesiones a la United Fruit
Company de los Rockefeller, que ya poseía la mitad de las tierras cultivables
del país. Especialmente en América Central y del Sur, el imperialismo militar
produjo enormes beneficios y crecimiento económico para EEUU mientras mantenía
a esos países enterrados en la pobreza. Todos los presidentes estadounidenses
han empleado el eslogan propagandístico de "hacer al mundo seguro para la
democracia" como pretexto y preludio de otra guerra ilegal de
colonización, pero el presidente Wilson explicó con mayor claridad el verdadero
significado de este término en una conferencia en la Universidad de Columbia en
1907 cuando dijo:
"Puesto
que el fabricante insiste en tener el mundo como mercado, la bandera de su
nación debe seguirle y las puertas de las naciones que se cierran contra él
deben ser derribadas. Las concesiones obtenidas por los financieros deben ser
salvaguardadas por los ministros de Estado, aunque en el proceso se ultraje la
soberanía de las naciones que no están dispuestas a ello."
"Aplicando
los recursos combinados de los cárteles industriales y bancarios de EE.UU., se
aprovecharon todos los medios de comunicación de masas disponibles para crear y
difundir historias sobre las virtudes de EE.UU. y el "estilo de vida
americano". Esta campaña de enorme éxito persuadió a los estadounidenses
de a pie para que trabajaran, lucharan y murieran por la ventaja especulativa
de la maquinaria bélica estadounidense. "El mayor misterio... que hay que
superar es la aparente contradicción entre los principios proclamados por Estados
Unidos y la intensidad de sus prácticas de operaciones encubiertas".
Philip Agee llamó en su día a la CIA "el ejército invisible del
capitalismo". (32) (33) De hecho, su conclusión después de dejarla [la CIA]
fue que el capitalismo nunca podría mantenerse sin una extensa fuerza militar y
policial secreta para suprimir la oposición al mismo. La autopsia de Valentine
del Programa Fénix vietnamita comienza reconociendo que la CIA fue (y es)
central en la política corporativa de Estados Unidos. "En Vietnam, la
Compañía desarrolló ... Phoenix como una campaña intensiva de gestión
corporativa y de relaciones públicas para lo que se llama "la construcción
de la nación". El objetivo general de la "construcción de la
nación" es destruir la infraestructura autóctona y nacionalista -lo que
los estadounidenses considerarían su gobierno estatal y local, junto con todas
las organizaciones y redes sociales por las que se organizan y mantienen las
comunidades- y sustituirla por una que funcione sobre la misma base que la
infraestructura corporativa estadounidense. La CIA estaba desarrollando lo que
más tarde se llamaría -también eufemísticamente- asociaciones público-privadas.
De hecho, el libre comercio significaba que las corporaciones estadounidenses
evitaban deliberadamente los costes de gobernar territorios económicamente
rentables. En su lugar, se prefirió lo que se ha llamado "un archipiélago
de imperios". Esto significó la expansión del principio británico de
gobierno indirecto mediante la creación y el apoyo a regímenes nominalmente
independientes que soportan todos los costes sociales a través de impuestos
abusivos, al tiempo de que se aseguran de que la mano de obra y los recursos
naturales sean de libre acceso para las corporaciones estadounidenses."
(T.P. Wilkinson / 9 de agosto de 2014)
Una
muestra de la marca salvaje del capitalismo estadounidense es un cable de
octubre de 1970 enviado a los agentes de la CIA en Chile por el personal de
Henry Kissinger, en respuesta a la elección en Chile de un nuevo gobierno
decidido a recuperar el control de la economía del país por las multinacionales
estadounidenses:
"Es
una política firme y continua que [el gobierno democráticamente elegido de]
Allende sea derrocado por un golpe.... Debemos continuar generando la máxima
presión hacia este fin utilizando todos los recursos apropiados. Es imperativo
que estas acciones se lleven a cabo de forma clandestina y segura para que el
USG [Gobierno de los Estados Unidos] y las manos estadounidenses queden bien
escondidas". Edward M. Korry, el embajador de Estados Unidos en Chile,
escribió: "Ni una tuerca ni un perno llegará a Chile bajo Allende. Una vez
que Allende llegue al poder, haremos todo lo que esté a nuestro alcance para
condenar a Chile y a todos los chilenos a la mayor privación y pobreza..." (34)
Del
libro de Howard Zinn “¿Imperio o Humanidad? Lo que el aula no me enseñó sobre
el Imperio Americano”:
"Leyendo
fuera del aula... Empecé a encajar las piezas de la historia en un mosaico más
amplio. Lo que al principio había parecido una política exterior puramente
pasiva en la década que precedió a la Primera Guerra Mundial, aparecía ahora
como una sucesión de intervenciones violentas: la toma de la zona del Canal de
Panamá a Colombia, un bombardeo naval en la costa mexicana, el envío de los
marines a casi todos los países de América Central, ejércitos de ocupación
enviados a Haití y a la República Dominicana. El motivo del establishment estadounidense... fue descrito a
principios de 1941 por Henry Luce, multimillonario propietario de las revistas
Time, Life y Fortune, como la llegada de El Siglo Americano. Había llegado el
momento, dijo, de que los Estados Unidos ejercieran sobre el mundo todo el
impacto de nuestra influencia, para los fines que consideráramos oportunos y
por los medios que consideráramos oportunos. Difícilmente se puede pedir una
declaración más sincera y contundente del diseño imperial". (35)
Zinn
escribió que los libros de historia y los discursos afirman invariablemente que
el ejército estadounidense es un "instrumento de civilización", no de
agresión, y que Estados Unidos se limita a difundir la libertad, los derechos
humanos y la democracia en todo el mundo. Sin embargo, añadió: "Para el
pueblo de Estados Unidos, y de hecho para los pueblos de todo el mundo, esas
afirmaciones se revelan tarde o temprano como falsas. La retórica, a menudo
persuasiva a primera vista, pronto se ve abrumada por los horrores que ya no se
pueden ocultar: los cadáveres ensangrentados... los miembros desgarrados... los
millones de familias expulsadas de sus hogares..."
Robert
Bowman, obispo estadounidense y veterano de Vietnam, escribió:
"No
se nos odia porque practiquemos la democracia, porque valoremos la libertad o
porque defendamos los derechos humanos. Nos odian porque nuestro gobierno niega
estas cosas a la gente de los países del Tercer Mundo cuyos recursos son
codiciados por nuestras corporaciones multinacionales. Ese odio que hemos
sembrado ha vuelto a perseguirnos en forma de terrorismo, y en el futuro, de
terrorismo nuclear".(36) (37)
Aquí
hay más voces, todas ellas con el mismo mensaje:
"...
el establishment no puede admitir [que] son
las violaciones de los derechos humanos las que hacen que ... los países sean
atractivos para las empresas, por lo que hay que falsear la historia,
incluyendo la negación de nuestro apoyo a los regímenes de terror y las
prácticas que proporcionan climas favorables a la inversión, y nuestra
desestabilización de las democracias que [no] cumplen [el] estándar de servicio
a la corporación transnacional ... Estados Unidos ha dado un apoyo frecuente y
entusiasta al derrocamiento de la democracia en favor de regímenes
"favorables a los inversores". El Banco Mundial, el FMI y los bancos privados
han prodigado sistemáticamente enormes sumas a los regímenes del terror, tras
su desplazamiento de los gobiernos democráticos, y varios estudios
cuantitativos han demostrado una relación positiva sistemática entre la ayuda
de Estados Unidos y del FMI/Banco Mundial a los países y sus violaciones de los
derechos humanos." (38) (39) (Edward S. Herman)
"Así
como Estados Unidos entrenó a militares y policías latinoamericanos en métodos
de lucha contra el "populismo" en sus países, ayudando así a producir
un "clima favorable de inversión" al llevar al poder a los Estados de
Seguridad Nacional, también se necesita una policía grande, bien entrenada y
despiadada en el país de origen para impulsar una agenda de derechas contraria
a los intereses de una gran mayoría. Hay ... una enorme conspiración tácita
entre el gobierno de Estados Unidos, sus agencias y sus corporaciones multinacionales,
por un lado, y las camarillas empresariales y militares locales del Tercer
Mundo, por otro, para asumir el control total de estos países y
"desarrollarlos" en régimen de empresa conjunta. Los líderes
militares del Tercer Mundo fueron cuidadosamente nutridos por el
establecimiento de seguridad de Estados Unidos para servir como
"ejecutores" de esta asociación de empresa conjunta, y han sido
debidamente suministrados con ametralladoras y los últimos datos sobre métodos
de interrogación de subversivos." (40) (Edward S. Herman)
"Estados
Unidos apoya a las dictaduras de derechas en América Latina, el sudeste
asiático y Oriente Medio... porque estos son los gobernantes que han atado su
destino político personal a las fortunas de las corporaciones estadounidenses
en sus países... Los líderes revolucionarios o nacionalistas tienen
circunscripciones e intereses políticos radicalmente diferentes. Para ellos,
crear "un buen clima de inversión" para Estados Unidos y desarrollar
su propio país son objetivos fundamentalmente contradictorios. Por lo tanto,
Estados Unidos tiene un gran interés económico en evitar que esos hombres
lleguen al poder o en organizar su destitución si lo hacen". (41) (Richard Barnet,
Intervention and Revolution)
"Los
dirigentes estadounidenses se han esforzado con mucho éxito en reprimir (1) la
aparición de formas de producción competitivas (socialistas, colectivistas,
comunitarias); y (2) las formaciones de capital competitivas (economías
capitalistas autónomas prósperas, o mixtas, en las naciones emergentes), y con
el ALCA y el AGCS, todos los servicios del sector público excepto la policía y
el ejército en todos los países capitalistas. El objetivo es la
tercermundización de todo el mundo, incluyendo Europa y América del Norte, un
mundo en el que el capital gobierne de forma suprema sin servicios del sector
público; sin sindicatos con los que hablar; sin una clase trabajadora próspera,
alfabetizada y eficazmente organizada con expectativas crecientes; sin fondos
de pensiones ni protecciones medioambientales, de consumo ni laborales, ni
planes médicos, ni ninguna de las otras cosas insufribles que reducen las tasas
de beneficio." (42) (Michael
Parenti)
"La
mano oculta del mercado nunca funcionará sin un puño oculto: McDonald's no
puede prosperar sin McDonnell Douglas..." (43) (Thomas
Friedman, New York Times)
"Las
grandes multinacionales no están dispuestas a enfrentarse a las contradicciones
morales y económicas de su propio comportamiento: producir en dictaduras con
salarios bajos y vender a democracias con salarios altos. De hecho, lo
sorprendente de las empresas globales es la facilidad con la que el capitalismo
de libre mercado deja de lado sus supuestos valores para hacer negocios. Las
condiciones de la libertad humana no les importan mientras la demanda del
mercado sea sólida. La ausencia de libertad, en todo caso, presta orden y
eficiencia a sus operaciones". (44) (William Greider)
“¿Por
qué deberíamos preocuparnos por los escuadrones de la muerte? Están acabando
con los comunistas, nuestros enemigos. Yo les daría más poder. Diablos, yo les
daría algunos cartuchos si pudiera, y a todos los demás también... ¿Por qué
deberíamos criticarlos? El escuadrón de la muerte, estoy a favor de ello".
(45) (46) (Ex
presidente de la Cámara de Comercio Americana en Guatemala)
Y
William Shirer, un autor estadounidense, escribió:
"Hasta
que no pasemos por ello nosotros mismos, hasta que nuestra gente no se encoja
de miedo en los refugios de Nueva York, Washington, Chicago, Los Ángeles y
otros lugares, mientras los edificios no se derrumben por encima de nuestras
cabezas y estallen en llamas y los cadáveres se precipiten, y que cuando
termine el día o la noche emerjamos de entre los escombros para encontrar a
algunos de nuestros seres queridos destrozados, nuestras casas desaparecidas,
nuestros hospitales, nuestras iglesias, nuestras escuelas demolidas, sólo
después de esa espantosa experiencia nos daremos cuenta de lo que le estamos
infligiendo al pueblo de Indochina ..." (47)
Colonización al
Estilo Americano
Colonizar
el mundo es una empresa complicada y difícil, principalmente porque la mayoría
de las naciones no están dispuestas a ser colonizadas y tienden a resistirse a
las invasiones extranjeras y a la esclavización de su pueblo. Por lo tanto,
normalmente se necesita un ejército grande y poderoso no sólo para invadir y
conquistar, sino frecuentemente para matar, torturar y aterrorizar a gran parte
de la población con el fin de mantener la obediencia. También se necesita un
gran número de funcionarios dispuestos a trasladarse a estas colonias para
gestionar la logística del saqueo de sus riquezas y recursos. Y por supuesto,
esto requiere grandes sumas de dinero y de esfuerzo.
Además,
normalmente debes permanecer presente en estas colonias. La historia ha
demostrado que es bastante difícil ser un "colonizador ausente", ya
que las colonias tienden rápidamente a volverse olvidadizas y desobedientes,
estando más interesadas en sus derechos que en los tuyos. Y con el hecho de
tener que sofocar las constantes rebeliones, la molestia de cargar todo ese oro
y tesoro, los campesinos egoístas que prefieren cultivar productos alimenticios
en lugar de opio, el tener que lidiar con un gobierno local que se resiste a
esclavizar a su pueblo, era un trabajo difícil. Pero los estadounidenses, tan
inventivos como siempre, descubrieron una forma nueva y casi sin esfuerzo de
colonizar el mundo sin dejar de asegurarse el flujo constante de tesoros a sus costas:
una verdadera colonización por control remoto. Así es como funcionaba:
·
Elige
un país objetivo con recursos naturales útiles.
·
Busca
entre los mandos militares un verdadero asesino patológico sin lealtad a su
país.
·
Envía
a la CIA para desestabilizar al gobierno, organizar un golpe de estado y
nombrar al comandante militar como presidente.
·
Proporciona
una amplia financiación, un suministro ilimitado y gratuito de armas y entrena
a tu nuevo dictador en la famosa "Escuela de las Américas", en los
principios de la tortura y la represión de la población civil.
·
Explica
claramente al nuevo dictador-marioneta que sólo es un "presidente
vitalicio", el lapso en cuestión (está) determinado enteramente por su
afán de reprimir a su población local mientras permita el saqueo de los
recursos de su nación por parte de las corporaciones estadounidenses.
·
Relájate
en la Casa Blanca y gestiona tu nueva "colonia" por control remoto,
Funcionó
de maravilla, en más de 50 países. Las multinacionales y los banqueros
estadounidenses podían entrar, prácticamente esclavizar a la población pagando
salarios de miseria, exportar todos los recursos, y convertirse no sólo en
obscenamente ricos, sino en enormes empresas a escala mundial.
Según
Steve Kangas, "estas operaciones de la CIA patrocinadas por el gobierno
estadounidense siguen el mismo guión recurrente: Las naciones desafortunadas
son el objetivo por una amplia variedad de razones: no sólo las amenazas a los
intereses comerciales estadounidenses en el extranjero, sino también las reformas
sociales liberales o incluso moderadas, la inestabilidad política y la falta de
voluntad de un líder para llevar a cabo los dictados de Washington. A menudo,
la amenaza proviene simplemente del ascenso de un líder popular apoyado por el
pueblo porque pretende llevar a cabo una reforma agraria, reforzar los
sindicatos, redistribuir la riqueza, nacionalizar la industria de propiedad
extranjera y regular las empresas para proteger a los trabajadores, los
consumidores y el medio ambiente".(48)
Para
conseguirlo, la CIA "utiliza todos los trucos del libro: propaganda, urnas
rellenadas, elecciones compradas, extorsión, chantaje, intriga sexual,
historias falsas sobre los oponentes en los medios de comunicación locales,
infiltración y desorganización de los partidos políticos de la oposición,
secuestro, palizas, tortura, intimidación, sabotaje económico, escuadrones de
la muerte e incluso asesinato". EE.UU. ha confeccionado una plantilla para
sus colonizaciones, y enseña las tácticas en la infame "Escuela de las
Américas" que conoceremos más adelante. También examinaremos algunos
ejemplos seleccionados de colonización estadounidense en acción, y obtendremos
una valoración de los resultados.
Cultivando la
Disparidad de Ingresos
Durante
muchas décadas, el mundo se ha acostumbrado a considerar a Estados Unidos como
el país más rico del mundo, asociando la riqueza individual con la supremacía
económica nacional. Las causas de esa condición se han examinado a veces en los
medios de comunicación populares, pero rara vez con mucha exactitud o
diligencia, y nunca sin una buena dosis de los mitos de la propaganda
estadounidense.
Pocos
estadounidenses, y aún menos personas en otros lugares, parecen saber que el gobierno
de Estados Unidos era plenamente consciente de su dominio económico, y que lo
perseguía como objetivo no sólo en términos absolutos sino también relativos.
Durante al menos los últimos 100 años, y tal vez durante mucho más tiempo, la
"dominación por la disparidad económica" fue parte integrante de la
estrategia de la política exterior estadounidense, acompañada de la
correspondiente supremacía planificada en los ámbitos militar y político.
Parece casi surrealista hacer esta afirmación, pero no era sólo la riqueza y la
supremacía económica lo que los estadounidenses codiciaban, sino también la
disparidad económica. Los Estados Unidos no sólo querían ser ricos, y ser más
ricos que otras naciones, sino también mantener a esas otras naciones en una
pobreza dependiente. Y esta posición ha sido constante durante muchas décadas.
Siga leyendo:
En
una conferencia celebrada en México en 1945, Estados Unidos exigió una
"Carta Económica de las Américas" (49) (50) destinada a eliminar lo que denominó "el azote
del nacionalismo económico", decidido a aplastar "la filosofía del
Nuevo Nacionalismo que abarca las políticas destinadas a lograr una
distribución más amplia de la riqueza y a elevar el nivel de vida de las
masas". Un funcionario del Departamento de Estado explicó que esto
significaba una objeción de Estados Unidos a los latinoamericanos que
"estaban convencidos de que los primeros beneficiarios del desarrollo de
los recursos de un país debían ser los habitantes de ese país". En
consonancia con esta actitud, Estados Unidos aceptó reconocer al gobierno de México
sólo a condición de que el artículo 27 de la Constitución mexicana no se
aplicara a las empresas petroleras estadounidenses. El artículo 27 establecía
que el petróleo mexicano era propiedad de México. La posición estadounidense
fue promovida enérgicamente por el Secretario del Tesoro de Estados Unidos,
Andrew Mellon, miembro de la familia que controlaba la Gulf Oil.
La Visión
Estadounidense de la Supremacía Económica de los Estados Unidos en 1948
En
1948, un hombre llamado George Kennan, que era director de Personal de
Planificación de Políticas del Departamento de Estado de EE.UU., publicó un
documento entonces ultra-secreto (PPS 23, 24 de febrero de 1948), en el que
exponía una evaluación honesta de la necesidad de una política imperial
estadounidense exitosa. El documento decía en parte:
"Tenemos
cerca del 50% de la riqueza del mundo, pero sólo el 6,3% de su población. Esta
disparidad es especialmente grande entre nosotros y los pueblos de Asia (y
China). En esta situación, no podemos dejar de ser objeto de envidia y
resentimiento. Nuestra verdadera tarea en el próximo periodo es concebir un
modelo de relaciones que nos permita mantener esta posición de disparidad sin
un perjuicio positivo para nuestra seguridad nacional. Para ello, tendremos que
prescindir de todo sentimentalismo y de toda ensoñación; y nuestra atención
tendrá que concentrarse en todas partes en nuestros objetivos nacionales
inmediatos. No debemos engañarnos pensando que hoy podemos permitirnos el lujo
del altruismo y la beneficencia mundial. Debemos dejar de hablar de objetivos
vagos y -para el Extremo Oriente (incluida China)- irreales, como los derechos
humanos, la elevación del nivel de vida y la democratización. No está lejos el
día en que tengamos que tratar con conceptos de poder directos. Cuanto menos
nos obstaculicen luego los eslóganes idealistas, mejor".(51) (52)
La
posición de Kennan expuesta anteriormente merece algunos comentarios. Nos dice
que los EE.UU. en ese momento tenían una disparidad de riqueza especialmente
grande con países como China, y que los EE.UU. deben idear "un patrón de
relaciones" que permita a los EE.UU. mantener esa disparidad. Y eso sólo
puede significar colocar a EE.UU. en una relación esencialmente de amo/esclavo
con esas naciones, que les obligue a aceptar su pobreza relativa y su condición
de subyugados de forma permanente. Más aún, esas "relaciones" deben
crearse en condiciones en las que nunca pueda desarrollarse ninguna amenaza
militar, económica o política para la perpetuación de la dominación
estadounidense.
Termina
afirmando que Estados Unidos no puede entregarse a ninguna tontería humanitaria
como "el sentimentalismo, el altruismo o la beneficencia mundial", y
que cualquier esperanza elevada para China, como tener derechos humanos o un
nivel de vida más alto, son "objetivos irreales", y que Estados
Unidos no debe dejarse obstaculizar por el "idealismo". En sus
palabras, EE.UU. no puede permitirse "el lujo" de preocuparse por
otras naciones, y EE.UU. no puede "engañarse a sí mismo" pensando que
podría permitir que esas otras naciones se desarrollaran y se enriquecieran, ya
que sólo manteniendo una extrema disparidad económica podrá seguir siendo
supremo. Según Kennan, EE.UU. debe concentrarse en todas partes en su objetivo
nacional inmediato de mantener la supremacía económica sobre todas las demás
naciones, y especialmente sobre naciones como China.
Los
lectores pueden sorprenderse al ver esta actitud declarada tan desnuda, pero la
supremacía económica, militar y política siempre ha sido un objetivo primordial
de Estados Unidos. Desde la fundación de la República estadounidense no ha
habido un momento en el que Estados Unidos no soñara, maquinara y planificara
esta dominación mundial. Y por supuesto, saquear los recursos de otras naciones
manteniendo su pobreza, era una parte natural de este plan. Nunca ha sido de
otra manera. Nunca fue un accidente del destino o de las circunstancias que el
gobierno de EEUU instalara dictadores en tantas docenas de naciones; esto se
hizo únicamente para permitir el libre saqueo por parte de las corporaciones de
los EEUU mientras se mantenía a esas muchas naciones en sujeción política y
militar, y a sus ciudadanos en la pobreza.
Este
plan deliberado rara vez se enunció abierta o claramente, pero las acciones de
Estados Unidos y sus multinacionales durante muchas décadas no dejan lugar a
dudas sobre su intención. Las observaciones de Kennan no hacen más que afirmar
lo que siempre se había entendido tácitamente en los pasillos del poder
estadounidense. Fue también por esta razón por la que Estados Unidos contribuyó
a la creación de organismos de la ONU como el Banco Mundial y el FMI. Éstos
nunca tuvieron como objetivo estimular o ayudar al desarrollo del mundo no
occidental, sino asegurar la pobreza perpetua y el libre saqueo de los recursos
de las naciones no desarrolladas, condiciones necesarias en la mente
estadounidense para mantener la dominación económica mundial. También es
importante señalar que en esta lucha por la dominación política y militar, los
Estados Unidos estaban siendo utilizados como una herramienta por los banqueros
internacionales para su propio plan de dominación mundial. En este proceso, los
EE.UU. acumularían recursos y riquezas, pero a través de los mecanismos de
financiación del FMI y del Banco Mundial, las familias bancarias europeas
acabarían siendo dueñas de gran parte de la tierra y de la infraestructura de
esas naciones.
Dadas
las circunstancias, no podemos sorprendernos de que América del Sur y Central,
por ejemplo, sean en su mayoría tan pobres hoy como lo eran hace 200 años,
después de dos siglos de "amistad, patrocinio y asistencia"
estadounidense a esas naciones. La única razón por la que países como Brasil,
Venezuela y Argentina se estén enriqueciendo poco a poco es que finalmente se
han desprendido del yugo del imperialismo estadounidense y de los banqueros
europeos, han derrocado a los dictadores instalados por Estados Unidos y han
comenzado a trazar su propio curso de desarrollo libres del aplastante peso del
colonialismo.
Pero
Estados Unidos no acepta de buen grado este giro de los acontecimientos, y hoy
sigue interfiriendo masivamente en los asuntos políticos internos de todas
estas naciones, con enormes volúmenes de dinero, propaganda y no poca violencia
organizada, en un intento de desbaratar su progreso. No en vano, en muchas
encuestas realizadas a lo largo de muchas décadas, Estados Unidos aparece
sistemáticamente como la nación más odiada del mundo.
La Visión
Estadounidense de la Supremacía Económica de Estados Unidos en 2010
"Si
hablas con los líderes chinos, creo que reconocerán inmediatamente que si más
de mil millones de ciudadanos chinos tienen los mismos patrones de vida ahora
mismo... que los estadounidenses, entonces a todos nosotros nos espera una
época muy miserable, el planeta simplemente no puede sostenerlo, así que
entienden que tienen que tomar una decisión sobre un nuevo modelo que sea más
sostenible..." -(53) El presidente
estadounidense Obama en Australia en 2010.
Se
puede ver que nada ha cambiado en la narrativa estándar de Estados Unidos. El
significado y las intenciones de Obama están tan perfectamente claros en 2010
como lo estaban los de Kennan 60 años antes: El mundo sólo tiene espacio para
un país rico, y ese país será Estados Unidos. Afirma sin tapujos la posición de
Estados Unidos de que China y otras naciones similares deben reducir sus
esperanzas y expectativas nacionales y aceptar que tendrán que seguir siendo
pobres para siempre para que Estados Unidos pueda perpetuar su supremacía
mundial. Obama recurre hábilmente a la "sostenibilidad" como una
excusa imperdonablemente deshonesta e interesada. Sus declaraciones son una
gran mentira. Nos está diciendo que si China continúa con su elevado ritmo de
progreso económico fuera del control de Estados Unidos, la supremacía y la
dominación estadounidenses no podrán mantenerse. Por lo tanto, según él, China
debe seguir siendo pobre. La justificación no declarada de su posición es que
Dios quiso que los estadounidenses gobernaran el mundo.
"
... si los países emergentes (como) China, India y Brasil... siguen un camino
en el que nos reemplazan como los mayores emisores de carbono, ese no es un
enfoque práctico sostenible..."
Lo
que Obama está diciendo en realidad es que si países como China sustituyen a
EE.UU. como los mayores emisores de carbono, también sustituirán a EE.UU. como
la mayor economía del mundo y EE.UU. se volverá lentamente irrelevante. Por
ello, el desarrollo de China no es "sostenible ni práctico" a los
ojos de Estados Unidos. Obama termina afirmando que EE.UU. quiere que China se
tome en serio sus "responsabilidades internacionales", es decir, su
responsabilidad de aceptar a EE.UU. como líder del mundo y aceptar seguir
siendo pobre y subdesarrollado para que los estadounidenses puedan seguir
siendo ricos y seguir saqueando y contaminando como su Dios quiere.
La
lógica de Obama es repugnante, egoísta, deshonesta e interesada, exigiendo que
los chinos adopten el sistema y los valores occidentales, pero no se les
permitirá el mismo nivel de vida que a los estadounidenses. Según él, Estados
Unidos mantendrá el modelo estadounidense pero no bajará el nivel de vida de
los estadounidenses, y por ello hace la Proclamación Imperial de que los chinos
deben convertirse en clones estadounidenses empobrecidos para mantener la
sostenibilidad y la armonía en el universo. Como escribió Song Luzheng en su
blog de París, "lo que hay que cambiar es el modelo occidental y no el
chino". Se preguntaba por qué los estadounidenses no han creado un modelo
sostenible hasta ahora, y puesto que su modelo es insostenible, ¿por qué lo
promueven globalmente como basado en valores universales?
Prerrogativa
Imperial
En
otro volumen de esta serie, titulado "Los secretos más sucios de Estados
Unidos", escribo sobre el experimento médico encubierto de los gobiernos
de Estados Unidos en Guatemala, donde un numeroso grupo de médicos apoyados por
el Departamento de Estado y el CDC llevaron a cabo una especie de guerra en el
país, en la que en un experimento militar equivocado infectaron a innumerables
miles de personas con sífilis y luego las dejaron morir lentamente. El Mundo,
uno de los principales periódicos españoles, publicó en agosto de 2011 un
artículo titulado "Guatemala, el laboratorio de campo de los Estados
Unidos", en el que el articulista afirmaba con precisión que el objetivo
de los norteamericanos era encontrar un país pobre, con infraestructuras
públicas y servicios sanitarios poco desarrollados, en el que un hombre con
acento americano, bata blanca y estetoscopio, pudiera cometer cualquier
cantidad de atrocidades bajo la pretensión de curar. Y que en los años 40,
Guatemala era un lugar ideal, donde "los más bajos y miserables" serían
víctimas fáciles de un abominable experimento diseñado sin escrúpulos en
Estados Unidos.
Una
profesora estadounidense llamada Susan Reverby, que conocía a algunos de los
participantes en ese "experimento", escribió una impactante apología
revisionista en la que se preguntaba: "¿Importan las atrocidades de
Guatemala? ¿A quién le importa? ¿Qué hay ahí, además de nuestro "sentido
lascivo y horrorizado de lo que hicieron sin permiso"? ¿Necesitamos otra
historia horrible sobre "los malos tiempos" de la investigación
médica?". (54) Continuó
afirmando que Guatemala importa principalmente porque "demuestra los vínculos
entre la periferia y la metrópoli...", una afirmación que requiere alguna
explicación. “Metrópoli" es otra palabra para referirse a la Ciudad Madre,
un eufemismo para referirse a Londres, el centro del Imperio Británico, siendo
la "Periferia" el resto del Imperio. En este contexto, estas palabras
son construcciones políticas de la teoría de los sistemas mundiales, siendo los
países de la periferia los menos desarrollados, los que no reciben su parte de
la riqueza mundial, los que tienen instituciones débiles, carecen de
tecnología, tienen sistemas educativos y sanitarios poco desarrollados, y
suelen ser explotados al máximo por las naciones occidentales desarrolladas.
Son vistos y utilizados como fuentes de recursos naturales, mano de obra barata
y productos agrícolas. Su único propósito es servir de combustible para el
fuego de la dominación de las naciones desarrolladas.
El
carácter de la Metrópoli, las naciones desarrolladas hoy ejemplificadas por los
EEUU, es el de un control dictatorial unidireccional en términos económicos,
políticos y militares. Es esencialmente un dominio directo de todas las
naciones no desarrolladas, ya sea por colonización o por coerción militar,
económica y política. Así que Reverby, la "profesora de ideas" para
mujeres jóvenes del Wellesley College, nos dice que las tragedias humanas de
Guatemala son irrelevantes ("¿a quién le importa lo que hicieron?"),
que el único aspecto importante de esos experimentos inhumanos es servir como
ejemplo vivo de la verdadera relación entre los pocos ricos supremacistas
blancos y los miles de millones de pobres de color: la de depredador y presa.
Fue en 1945 -más o menos al mismo tiempo que estas atrocidades en Guatemala-
cuando el gobierno de EE.UU. lanzó su amarga campaña para eliminar "el
azote del nacionalismo económico" propugnado por las naciones pobres que
creían que los beneficiarios de sus recursos y desarrollo debían ser sus
propios ciudadanos. También mencioné anteriormente el documento político de
George Kennan de 1948, en el que se afirmaba la necesidad de mantener una
dramática disparidad económica entre EE.UU. y todas las demás naciones. (55)
Desde
los primeros días de la nación estadounidense, fue esta teología de la
supremacía blanca la que ha dictado la lógica, la ética y la metafísica de la
élite estadounidense, y es en el contexto desnudo de esta filosofía moral
reprobable que la misma élite estadounidense, apoyada por el gobierno de los
Estados Unidos, se sintió no sólo con la libertad sino con el derecho natural
de utilizar al pueblo de Guatemala como un zoológico médico. Es, por supuesto,
bastante inhumano, pero para esta élite judeocristiana es el orden natural de
su Dios que los débiles y los negros se hagan prácticamente útiles y se sometan
a la utilidad y a la búsqueda de la felicidad de los estadounidenses. Esta es
la hipótesis fundamental sobre la que funciona el sistema estadounidense y por
la que se explican los efectos naturales de las acciones estadounidenses. En
este instrumento primario de la subordinación de los débiles despreciables se
tocan los acordes de la armonía musical de la fe judeocristiana occidental.
El
éxito comercial estadounidense ha sido durante muchas décadas el resultado de la
política exterior de Estados Unidos a través del cañón de una pistola. Y hoy en
día, Estados Unidos sigue el mismo camino de utilizar su poder militar para
ayudar a las multinacionales estadounidenses a saquear los recursos de Europa
del Este, Oriente Medio, América y el Sudeste Asiático, bajo el pretexto de
"hacerlos seguros para la democracia". El general del Cuerpo de
Marines de Estados Unidos, Smedley Butler, que fue uno de los dos únicos
estadounidenses que ganó dos veces la Medalla de Honor de Estados Unidos, pensó
en los años 30 en escribir su autobiografía, y afirmó: "Hay cosas que he
visto, cosas que he aprendido que no deberían quedar sin decir. La guerra no es
más que un tinglado. La mejor manera de describir un tinglado es... como algo que
no es lo que le parece a la mayoría de la gente. Sólo un pequeño grupo interno
sabe de qué se trata. Se lleva a cabo para el beneficio de unos pocos a
expensas de las masas. La guerra es un tinglado para proteger intereses
económicos, y nuestros soldados son enviados a morir en suelo extranjero para
proteger las inversiones de las grandes empresas."
Butler
escribió: "Estados Unidos ha destruido rutinariamente la democracia en
todo el mundo mientras sus líderes afirmaban estar difundiendo la democracia.
Pasé 33 años en los Marines, la mayor parte de mi tiempo siendo un musculoso de
clase alta para las grandes empresas, para Wall Street y para los banqueros. En
resumen, fui un chantajista, un gángster del capitalismo. El público en general
paga la factura. Esa factura rinde una horrible cuenta. Lápidas recién
colocadas, cuerpos destrozados. Mentes destrozadas. Corazones y hogares rotos.
Inestabilidad económica. Impuestos agotadores para generaciones y generaciones.
Ayudé a hacer que México, especialmente Tampico, fuera seguro para los
intereses petroleros estadounidenses en 1914. Ayudé a hacer de Haití y Cuba
unos lugares decentes para que los chicos del National City Bank recaudaran
ingresos. Ayudé en la violación de media docena de repúblicas centroamericanas
para los beneficios de Wall Street. Ayudé a purificar Nicaragua para la casa
bancaria internacional de Brown Brothers en 1909-1912. Despejé el camino en la
República Dominicana para los intereses azucareros estadounidenses en 1916. En
China ayudé a que la Standard Oil siguiera su camino sin ser molestada". (56)
En
otro discurso declaró: "La guerra era en gran medida una cuestión de
dinero. Los banqueros prestan dinero a los países extranjeros, y cuando éstos
no pueden devolverlo, el Presidente envía a los marines a buscarlo. Lo sé: he
estado en once de esas expediciones". En un artículo publicado en
"Common Sense" en 1935, Butler afirmó que el notorio banco Brown
Brothers de la familia Harriman estaba detrás de los marines estadounidenses
que actuaban como "chantajistas" y "gángsters" para
explotar a los campesinos de Nicaragua. Prescott Bush, el abuelo del presidente
estadounidense George Bush, era el director general de Brown Brothers, Harriman.
El
General David Shoup, ex Comandante de los Marines de los Estados Unidos,
escribió en 1966: "Creo que si tuviéramos, y quisiéramos, mantener
nuestros sucios y sangrientos dedos empapados de dólares fuera de los asuntos
de estas naciones tan llenas de gente deprimida y explotada, llegarían a una
solución propia. Y ... al menos lo que consiguieran será lo suyo, y no el
estilo americano, algo que no quieren y sobre todo no quieren que se lo hagan
tragar los americanos" (57)
Es
cierto que una de las razones, y quizá la principal, por las que Estados Unidos
se centró tanto en su fuerza militar fue para promover sus ambiciones
comerciales. Ya en la década de 1850, Estados Unidos utilizaba la "diplomacia
de las cañoneras" -amenazas militares navales- para imponer sus exigencias
comerciales. En este sentido, Estados Unidos seguía el modelo de las potencias
coloniales europeas, que habían dominado el proceso de intimidar a las naciones
para que otorgaran concesiones comerciales y tratados muy desiguales
simplemente mostrando la amenaza de una fuerza militar abrumadora. La mayoría
de las veces, la mera visión de una flota de barcos de guerra frente a las
costas de un país era suficiente para obtener el cumplimiento de casi todas las
demandas.
Fue
esta misma amenaza naval la que obligó a la reina de Hawái a abdicar y entregar
su país a un estadounidense que codiciaba las plantaciones de esa nación(58) (59) (60), y más tarde en obligar a Japón a abrir sus
fronteras al comercio (61). Cuando los estadounidenses discuten hoy este asunto,
su opinión colectiva es que quizá no fue muy agradable, pero "todo lo que
hicimos fue convencer a Japón de que comerciara con nosotros, y eso no es malo.
Japón se benefició tanto como nosotros". Pero esta postura, bastante
ingenua y simplista, ignora las grandes desigualdades de los acuerdos
comerciales que se celebraron posteriormente. Y fue este acto de aterrorizar a
Japón el que desencadenó de forma más o menos directa la Restauración Meiji,
poniendo a los japoneses en su propia borrachera de imperialismo en China.
En
cualquier caso, durante al menos los últimos 200 años, la diplomacia de las
cañoneras o una de sus variantes fue la forma dominante para que Estados Unidos
estableciera nuevos socios comerciales y cumpliera con sus ambiciones
imperiales en expansión. En años posteriores, como veremos, la variante más
común del gobierno estadounidense era derrocar al gobierno local e instalar una
dictadura militar cautiva que diera rienda suelta a las multinacionales
estadounidenses para saquear literalmente los recursos de cada nación y
proporcionar por la fuerza mercados casi ilimitados para los productos
estadounidenses. La doctrina estadounidense, a lo largo de la mayoría de las
administraciones, ha sido siempre la de que Estados Unidos tiene derecho a recurrir
a la fuerza unilateral para garantizar "un acceso desinhibido a los
mercados clave, a los suministros de energía y a los recursos
estratégicos", tal como lo expresó Clinton, y la creencia en este
"derecho" sigue sin disminuir en la actualidad. (62) (63) (64)
Un
ejemplo importante del "derecho de acceso desinhibido" de los
estadounidenses es Panamá, un país minúsculo situado en la zona de transición
de América Central a América del Sur, donde el enlace continental sólo tiene
unos 50 kms. de ancho y que contiene el Canal de Panamá, que permite el paso
entre los océanos Atlántico y Pacífico sin tener que hacer el largo y peligroso
viaje alrededor del extremo sur de América del Sur. Pocos estadounidenses
parecen saber que Panamá se convirtió en un país independiente hace
relativamente poco tiempo, que siempre había sido la provincia panameña de
Colombia. Hace unos 100 años, el gobierno estadounidense quiso construir un
canal de transporte a través del estrecho istmo, pero Colombia rechazó la
propuesta cuando Estados Unidos exigió que el canal y las tierras circundantes
fueran propiedad de Estados Unidos como suelo americano soberano a perpetuidad.
Así que el presidente Roosevelt envió al ejército estadounidense,
"liberó" el istmo, declaró un nuevo país llamado Panamá, nombró a un
presidente local obediente y se adueñó de su nuevo "país".
Durante
mucho tiempo fue casi imposible conocer la verdad real sobre la creación de
Panamá y la historia del canal. Los textos de historia de EE.UU. presumían
efusivamente del ingenio y la destreza estadounidenses en la construcción del
canal, pero en ninguna parte mencionaban la agresión militar y el secuestro de
un país. Un típico texto de historia estadounidense nos dice sin más detalles:
"En 1903 Estados Unidos se aseguró el derecho, mediante un tratado, de
construir un canal a través de Panamá". En las repetidas ocasiones en las
que Colombia envió tropas en intentos infructuosos de liberar su provincia, los
libros de historia estadounidenses e incluso las páginas web del gobierno de
Estados Unidos califican estos hechos de "represión de una insurrección
local", o en ocasiones, de "protección de los intereses
estadounidenses". Un libro de texto de historia de una universidad estadounidense
afirmaba que Estados Unidos envió tropas a Panamá "para mediar en una
disputa fronteriza", siendo la disputa, por supuesto, que no había
frontera, que Panamá era una provincia de Colombia. La "nueva"
constitución panameña concedió a Estados Unidos el derecho a "intervenir
en cualquier parte de Panamá, para restablecer la paz pública y el orden
constitucional", y Estados Unidos lo hizo en numerosas ocasiones,
generalmente para asegurar un resultado favorable en las elecciones
"democráticas" de Panamá. Varios presidentes o candidatos panameños
"murieron inesperadamente" durante la campaña electoral, y en más de
una ocasión los militares estadounidenses tuvieron que intervenir para proteger
a su presidente títere instalado del linchamiento por parte de turbas enfurecidas.
Por
supuesto, el canal fue tan ventajoso en términos económicos y militares como
los estadounidenses esperaban. Ahorró a los barcos estadounidenses innumerables
miles de millones de dólares en costes adicionales de combustible y aportó
cientos de miles de millones de dólares en tasas de tránsito para el tesoro
estadounidense. El canal también proporcionó enormes ventajas políticas, ya que
permitió al ejército estadounidense un acceso más fácil a ambos océanos y los
estadounidenses pudieron controlar el acceso de los buques militares y
comerciales de otras naciones, convirtiéndose en una preciada herramienta del
imperialismo estadounidense para la extorsión de conformidad y sumisión. La
mayoría de los occidentales tienen una imagen del Canal de Panamá como una
especie de ruta de transporte no partidista disponible para toda la navegación
mundial, pero eso nunca ha sido cierto. EE.UU. ha utilizado repetidamente el
Canal como herramienta de negociación para la conformidad imperial, y para su
propia ventaja militar y comercial. Los buques militares estadounidenses
transitan regularmente por el canal, pero ¿imagina el mundo que los buques
rusos hacen lo mismo, o que un buque iraní, si se le permite el paso, pagará la
misma tarifa de tránsito que un buque estadounidense? De hecho, una de las
principales herramientas que utilizó Estados Unidos para provocar que Japón
atacara la flota en Pearl Harbor fue el cierre del canal a toda la navegación
japonesa, y a todos los buques, especialmente los que transportaban petróleo,
que se dirigían a Japón. (67). Si añadimos
las ganancias financieras y los enormes beneficios políticos y militares, el
valor del Canal de Panamá para el ascenso de Estados Unidos estaba más allá de
toda estimación.
El
nuevo territorio imperial estadounidense de Panamá tuvo otros usos que no
fueron ampliamente publicitados y que permanecieron desconocidos durante muchas
décadas. Uno de ellos fue que Panamá se convirtió en la ubicación de la mayor y
más notoria instalación de entrenamiento terrorista y de tortura del mundo, la
famosa "Escuela de las Américas" operada por Estados Unidos, donde la
CIA y el ejército estadounidense instruyeron y entrenaron a casi todos los
brutales dictadores y gobiernos terroristas del mundo en todas las bellas artes
de la tortura, los actos de terrorismo, el sabotaje, las revoluciones y la
represión de poblaciones civiles (68). Panamá
también fue utilizada como base de operaciones para las invasiones ilegales de
otras naciones en América Central y del Sur, así como por la CIA para sus
actividades en la desestabilización política de otras naciones de la región (69). Debido a la ubicación de Panamá y a su control por
parte de Estados Unidos, también tenía un valor inestimable para la CIA en sus
operaciones de narcotráfico internacional. (70) (71) (72).Para que no quede duda, la población y la economía
panameñas no obtuvieron casi ningún beneficio. La participación de Panamá en
los ingresos del canal fue una miseria, y se prohibió explícitamente a las
empresas panameñas prestar servicios a la zona del canal o a los barcos que
transitaban por ella. La presencia y el control estadounidenses siempre han
tenido el resentimiento de la población local, y todavía lo tienen hoy. El país
ha sufrido repetidas revueltas y trastornos civiles masivos debido a la
arrogancia estadounidense y al control manifiesto de las elecciones, y los lugareños
se han rebelado repetidamente para derrocar al "presidente" impuesto
por Estados Unidos. Wikipedia nos dice que "los funcionarios
estadounidenses supervisaron las elecciones a petición de los gobiernos en
funciones". ¡Uh Uh!. Pero esta no es la versión local.
En
eventos relacionados, pocas personas son conscientes de los llamados
"acuerdos de protección financiera" que el gobierno de EE.UU. -a
instigación de los banqueros de la FED- impuso por la fuerza a muchas naciones
en las Américas, acuerdos por los que los bancos de EE.UU.
"gestionarían" el dinero en efectivo y las finanzas de estas naciones
más pequeñas, siempre para gran beneficio de los banqueros y en detrimento de
las víctimas. En el caso de Panamá, por ejemplo, EE.UU. se negó a pagar directamente
a Panamá los pagos anuales de alquiler por el uso de la tierra relacionada con
el Canal de Panamá, y en su lugar entregó el dinero a los banqueros de J. P.
Morgan, que debían invertir el dinero en nombre de Panamá, pero que invirtieron
los fondos en bienes raíces en Nueva York, obteniendo miles de millones de
beneficios a lo largo de un siglo, mientras pagaban a Panamá sólo un pequeño
interés anual.
La
mayoría de los países de América Central y del Sur han estado sujetos a estos
contratos financieros peculiarmente estadounidenses. Estos controles
financieros tan comúnmente impuestos a las naciones más pobres de las Américas
proporcionaron a los EE.UU. un poder político abrumador y enormes beneficios
financieros, así como la deseada disparidad de ingresos, ya que los fondos de
una nación no se liberarían para fines sociales incurriendo en el descontento
de los estadounidenses. Cualquiera de estas naciones que intentara gastar en
servicios sociales o en el desarrollo de infraestructuras sin el permiso expreso
de EE.UU., activaría automáticamente la "obligación de una
intervención" por parte del ejército estadounidense. En total, los
beneficios obtenidos por unos pocos banqueros e industriales de la élite
estadounidense gracias a estos acuerdos fueron astronómicos durante un siglo.
Durante más de 100 años, todo el continente del Sur fue tratado como un
lucrativo, aunque reacio y problemático, centro de de división de beneficios
para los banqueros e industriales estadounidenses. Esto sigue ocurriendo hoy en
día. Los países en desarrollo que obtienen un préstamo de 10.000 millones de
dólares del Banco Mundial para el desarrollo de infraestructuras puede que
nunca lleguen a tocar ese dinero, ya que finalmente se pagará a empresas
estadounidenses u otras occidentales. A menudo, los fondos se quedan en un
banco estadounidense a la espera de su distribución, durante la cual el dinero
podría producir convenientemente enormes beneficios para un fondo de cobertura
o financiar una bonita promoción de condominios en Manhattan. Los capitalistas
nunca dejan que el dinero se quede parado, aunque no sea suyo.
Pero
eso no fue todo. Por usar a Haití como ejemplo, Estados Unidos ha interferido
constantemente en los asuntos internos de Haití durante más de 100 años,
derrocando gobiernos elegidos y sustituyéndolos por dictadores, invadiendo
Haití seis o siete veces para confiscar los ingresos del gobierno en nombre de
lo que ahora es Citibank. Más de una vez, los marines estadounidenses
invadieron el país, irrumpieron en el banco central de la nación y robaron todo
su dinero, incluidos todos los depósitos de oro de Haití. (73) (74) (75) Cuando Haití
se negó a entregar sus bancos al Citibank y sus ferrocarriles a una empresa
estadounidense, Estados Unidos lanzó una abrumadora invasión militar durante la
cual reescribió la constitución de Haití, entregó casi toda la industria a
empresas estadounidenses, disolvió el ejército del país y lo sustituyó por una
fuerza de policía militar estadounidense, masacró a decenas de miles de civiles
y esclavizó a otros cientos de miles para construir un ferrocarril que llevara
los recursos de Haití a los barcos estadounidenses. Estados Unidos dirigió el
país como una dictadura militar durante décadas y reprimió con saña toda la resistencia
local, al tiempo que imponía un bloqueo informativo total para que ninguna
noticia pudiera escapar. En los libros de historia y en la propaganda del
gobierno estadounidense, los militares sólo estaban allí "para mantener el
orden durante la amenaza de insurrección", y por supuesto, "para
proteger los intereses estadounidenses". El pequeño Haití y muchos países
pobres como él, han contribuido enormemente a la riqueza estadounidense.
La
CIA organizó el derrocamiento del gobierno electo de Guatemala (76) para instalar
a Ríos Montt, otro asesino patológico financiado por Estados Unidos, y lo apoyó
durante 40 años de escuadrones de la muerte entrenados y patrocinados por la
CIA. Montt se especializó en la tortura, las desapariciones, las ejecuciones
masivas y una crueldad inimaginable, con el resultado de más de 200.000
víctimas. Fue uno de los acontecimientos más inhumanos de todo el siglo XX, en
gran parte patrocinado por el presidente estadounidense Reagan. Y no sólo
patrocinado, sino alabado; Montt asistió a la investidura presidencial de
Reagan y fue uno de sus buenos amigos. Pero el dictador, apoyado por EEUU,
había entregado prácticamente toda su nación a los banqueros y corporaciones
estadounidenses. En aquella época, sólo los Rockefeller poseían más del 40% de
la tierra cultivable de Guatemala, así como toda la red de ferrocarriles y el
sistema de telégrafos, y también el único puerto del país. Anteriormente,
cuando EE.UU. se preparaba para su invasión de Guatemala, muchos de los
documentos de planificación fueron filtrado al gobierno guatemalteco, que los
publicó en los medios de comunicación y exigió una explicación de EE.UU.. Por
supuesto, el Departamento de Estado afirmó que las acusaciones eran
"ridículas", y añadió además: "La política de Estados Unidos es
no interferir en los asuntos internos de otras naciones. Esta política ha sido
reafirmada en repetidas ocasiones". Y la revista Time, siempre servicial,
afirmó que esos documentos eran sólo un complot ruso para avergonzar a Estados
Unidos. Y entonces la CIA continuó con sus planes, asesinando al presidente y
derrocando al gobierno como si nada hubiera pasado. Los estadounidenses no se
avergüenzan fácilmente.
Además
de saquear los bancos centrales de Haití, Puerto Rico, Panamá, Guatemala y
algunos otros en el vecindario, los estadounidenses saquearon los bancos de
muchas otras naciones. Estaba Cuba, por supuesto, saqueada más de una vez, y
Filipinas después de la guerra hispanoamericana y de nuevo durante la Segunda
Guerra Mundial. Al vencedor le corresponde el botín. Lo mismo ocurrió con
Afganistán e Irak, aunque el New York Times no quiso deprimirte con esa
noticia. Y Libia, donde casi lo primero que ocurrió tras la muerte de Khaddaffi
fue el saqueo de los 30.000 millones de dólares en oro del banco central, una
especie de donación a las familias bancarias europeas por parte de los rebeldes
libios, que sorprendentemente fundaron su propio banco central con Rothschild
como presidente. Y tuvimos a Ucrania, donde la FED de EE.UU. alivió a ese país
de sus 20.000 millones de dólares en lingotes de oro, transfiriéndolos a Nueva
York "para su custodia", para no volver a verlos nunca más. Rusia fue
fuertemente saqueada (de nuevo) después del colapso de la URSS, al igual que la
mayoría de los otros países de Europa del Este, y más recientemente los
fragmentos de Yugoslavia. Sin duda hay otros, aunque la documentación y las
admisiones de culpabilidad no son fáciles de obtener en estos asuntos. Puede
que las cantidades no le parezcan grandes, pero 30.000 millones de dólares por
aquí y 30.000 millones por allá, y pronto tendremos mucho dinero.
Sin
embargo, para no perder el punto principal, todas estas naciones de América del
Sur y Central estaban sometidas más o menos a las mismas presiones políticas,
militares y financieras que Panamá, Haití y Guatemala. Por eso siguen siendo
pobres hoy en día, después de más de 200 años de ayuda estadounidense. Todas
estas naciones han hecho colectivamente una enorme contribución al tesoro de
Estados Unidos y a la acumulación de riqueza de la élite estadounidense, una
historia tan inhumana como despreciable que ha sido totalmente borrada del
registro histórico occidental. Los estadounidenses nunca lo han sabido, y las
poblaciones locales nunca lo olvidarán. No es una sorpresa que gran parte del
mundo odie amargamente a los Estados Unidos hoy en día, pero los
estadounidenses nunca ven esta cara de su país. De hecho, Internet y las máquinas
de relaciones públicas de los Estados Unidos están llenas de elogios al poder
de las empresas estadounidenses, con términos como "La
industria del cobre estadounidense: Futuro Brillante, Pasado Glorioso".
Pero ese "pasado glorioso" consistió en violar, saquear y expoliar a
Chile durante más de 200 años.
El Trabajo, la
Maldición del Capitalismo
La
mano de obra es casi siempre el mayor componente de los gastos de explotación
de las empresas, y en muchos sectores representa el 50% o el 60% de los costes totales.
Elimine los costes laborales y pronto sus beneficios serán astronómicos.
Calcule eso durante 500 años y probablemente tendrá todo el dinero del mundo. Y
si sus competidores pagan los salarios normales del mercado, usted será la
única empresa que sobreviva en el mundo mucho antes de que transcurran esos 500
años. ¿Cómo podría ser de otra manera? Sin costes de mano de obra, puede vender
sus productos a un precio mucho más bajo que los costes reales de fabricación
de sus competidores y obligar rápidamente a todos los demás a abandonar el
negocio. En ese momento puedes subir tus precios de venta a casi cualquier
nivel y experimentar márgenes de beneficio más allá de los sueños más salvajes
de la avaricia. Esto es lo que la mayoría de las empresas multinacionales
intentan hacer hoy en día. Cuando miran sus estados financieros, la cifra que
más destaca es el elevado componente laboral, así que para aumentar los
beneficios recortan personal, congelan la contratación y rechazan los aumentos
salariales (excepto para los ejecutivos). La mano de obra es siempre el
componente más vulnerable, ya que la mayoría de los costes fijos y variables
tienen poco margen de mejora, y la mayoría de los gastos generales ofrecen poco
margen de ahorro. Los costes de fabricación alcanzan rápidamente un nivel a
partir del cual no pueden reducirse más, por lo que la mano de obra es el
objetivo obvio.
Esto
es tan cierto que hoy en día casi no hay personas que se hayan enriquecido sin
violar las sensibilidades de la mano de obra que emplearon. Mire a Apple, uno
de los favoritos de Estados Unidos, con cerca de 200.000 millones de dólares en
beneficios no declarados en el extranjero. Apple robó todo ese dinero, o al
menos lo hicieron sus proveedores. Steven Jobs es venerado como un innovador
debido al iPhone de Apple, pero el iPhone no era nada. La verdadera innovación
de Jobs fue encontrar una empresa -Foxconn- que construyera un campo de
concentración de un millón de empleados donde fabricar y ensamblar los iPhones,
mientras el millón de jóvenes trabajadores vivía al borde de la inanición. Si
Jobs hubiera aceptado la responsabilidad de los que en realidad eran empleados
de Apple y les hubiera pagado algo parecido a un salario digno, esos 200.000
millones de dólares serían cero. El "factor genial" del iPhone es
irrelevante en esta ecuación. Los beneficios de Apple no vinieron de lo genial;
vinieron del robo de los salarios de los jóvenes más vulnerables de la sociedad
que necesitaban un trabajo y un comienzo en la vida. Para tener éxito en su
misión, Jobs primero tenía que asegurarse de que ellos fracasaran en la suya. Y
lo hizo.
Pensemos
en Sam Walton, de Wal-Mart. Esto es precisamente lo que hizo: pagar de menos a
un millón de empleados durante 30 o 40 años, muy por debajo de las tarifas salariales
estándar y con un empleo sólo a tiempo parcial para evitar los elevados costes
de las prestaciones como la asistencia sanitaria, las pensiones y el seguro de
desempleo, que suelen suponer el 30% o más de la factura salarial. Con este
enfoque, Walton podía rebajar los precios de venta de sus competidores por un
margen sustancial y convertirse en casi el único en juego en la ciudad. Si se
le permite continuar, pronto será el único en la ciudad. Y hoy se dice que los
diversos herederos de Sam Walton poseen el 30% de toda la riqueza de Estados
Unidos. En China, Li Ka-Shing, el hombre más rico de Hong Kong, encaja en el
mismo molde. Maltrataba y pagaba tan mal a sus empleados, que su fábrica de
flores de plástico fue el detonante de la sangrienta guerra civil de Hong Kong,
que duró nueve meses en la década de 1960.
Li
sobrestimó su capacidad de saqueo -un error que no cometió Sam Walton- y el
mundo explotó. Pero para cuando la sangre corría literalmente por las calles,
Li había acumulado suficiente efectivo para comprar todo muy barato y hacerse
aún más rico. Si escarbas en la historia de cualquier hombre rico de hoy,
encontrarás que, con pocas excepciones, hicieron exactamente lo que Steve Jobs,
Sam Walton, Jack Ma y tantos otros han hecho: enriquecerse a costa de los
trabajadores. Estas son las mismas personas que hoy se promocionan en los
medios de comunicación como generosos filántropos y amables humanistas,
salvando árboles y promoviendo abortos. Y todos ellos son miserables fraudes.
Esa filantropía debería dirigirse a los empleados con cuyos sacrificios se
enriquecieron en un principio, si es que alguno de ellos sigue vivo.
General
Motors tuvo éxito de la misma manera que Apple y Wal-Mart, con un pequeño giro
que combina ambos métodos. Con los sindicatos siendo todavía poderosos, GM no
tenía la flexibilidad necesaria para matar de hambre a sus propios
trabajadores, así que adoptó el enfoque de Apple de la fama y la hambruna. GM
dejó de fabricar todos sus componentes y subcontrató la fabricación a sus
proveedores, lo que dio a GM no sólo ventaja sino inmunidad frente a la ira del
sindicato UAW. GM ofreció un volumen compras masivas a los proveedores, pero a
precios tan bajos que se vieron forzados a seguir el molde de Foxconn: vida en
un campo de concentración y salarios que proporcionaban un festín a los
beneficios de GM y hambruna a todos los demás. La situación era tan mala que
los contratos de GM incluían una cláusula de disminución adicional del 5% de
los costes en cada año del contrato, y se negaba a permitir que un proveedor
participara en un nuevo contrato sin conceder primero una disminución del 10%
del precio en cualquier contrato existente. Por supuesto, GM era muy odiada, ya
que esta estrategia de subcontratación significaba que los trabajadores de
otros absorberían toda la carga financiera de la avaricia de GM, millones de
trabajadores concediendo cada uno diez mil dólares cada año a los resultados de
GM.
Esta
fue la estrategia que sustentó el enfoque estadounidense de colonización
militar y saqueo de las naciones subdesarrolladas. Con el respaldo de los
militares y del Departamento de Estado, las multinacionales estadounidenses
aplicaron estas políticas a más de 50 países de América, África y Asia.
Negociaron los precios de las materias primas y de los productos hasta casi
cero, mientras pagaban salarios de hambre y utilizaban al dictador instalado
para mantener el terror suficiente con la opresión de la población para impedir
los conflictos laborales y cualquier pensamiento de formar sindicatos. Esta
filosofía laboral tan querida hoy por Wal-Mart, Apple, GM, Coca-Cola, Nike y
tantas otras multinacionales estadounidenses, fue perfeccionada por el
Departamento de Estado de EEUU mucho antes de que estas empresas nacieran.
Volvamos
a Wal-Mart por un momento. Si Sam Walton pudo, en el espacio de 30 o 40 años,
construir con este método la mayor empresa de venta al por menor del mundo,
¿qué podría lograr en 100 años, o en 300 años, o en 500? Sí, en ese parpadeo
relativamente corto en el tiempo, sus miserables vástagos ya poseen el 30% de
toda la riqueza de los Estados Unidos, ¿cuánto tendrían en 100 años, o 300, o
500? No es un salto lógico imaginar a Walton siendo no sólo el mayor, sino el
único minorista de importancia en el mundo, ni tampoco es un salto imaginarlo
comprando muchas otras empresas e industrias y aplicándole su fórmula probada.
Dentro de 100 o 200 años, podría tener la única tienda de alimentación del
mundo, o farmacia, u hospital, y de hecho la empresa ha entrado en todos estos
campos y más, y está intentando hacer precisamente eso.
Pero
Sam Walton tenía que pagar algo a sus empleados, así que les pagó entre 1/2 y
2/3 de un salario estándar (sin beneficios), y ya ha visto lo que consiguió.
Pero, ¿y si no hubiera tenido que pagarles nada? ¿Y si su única obligación
fuera alimentarlos y dejarlos dormir en su almacén? ¿Y si todos sus hijos se
convirtieran automáticamente en empleados no remunerados de Wal-Mart a partir
de los seis años de edad, recibiendo también sólo comida y alojamiento? ¿Cuánto
más rico sería hoy? Si pudiera seguir en este modelo, ¿cuánto más rico sería
dentro de 500 años? Ahora retrocedamos en el tiempo e imaginemos el resultado
si Sam hubiera abierto su primer Wal-Mart en Plymouth Rock hace 500 años, y
nunca hubiera pagado un céntimo de salario desde entonces. E imaginemos además
que casi todas las empresas estadounidenses de todos los sectores operaran de
esta misma manera mientras que ninguna empresa de otros países lo hiciera.
¿Qué
tiene esto que ver con la esclavitud y con la forma en la que Estados Unidos se
hizo rico? Como ya habrá adivinado, todo.
Esclavitud
Ninguna
otra nación en la historia reciente del mundo ha debido el mérito de su
desarrollo económico a un solo factor tanto como los estadounidenses le deben a
los siglos de un suministro ilimitado de trabajadores sin salario. Más de 100
millones de negros africanos y aún más millones de blancos ingleses, irlandeses
y escoceses, junto con muchos millones más de chinos e indios, fueron
secuestrados y esclavizados por los traficantes de esclavos estadounidenses y
judíos en una empresa comercial masiva que duró varios cientos de años, y cuyos
efectos siguen siendo muy evidentes en toda América hoy en día. La esclavitud
no era una cuestión de que los ricos tuvieran sirvientes personales. Era una
empresa totalmente capitalista promulgada para maximizar los beneficios de los
terratenientes, una forma de trabajo forzado promulgada legalmente y respaldada
por la legislación estadounidense. La esclavitud era tan importante para la
economía estadounidense que, durante mucho tiempo, la medida económica estándar
en Estados Unidos no era el PIB, sino el valor en dólares de la producción por
esclavo. El sur de EE.UU. habría sido en su momento la nación más rica del
mundo si se midiera en función de otros países.
Una
nación que durante cientos de años no paga ningún salario al 80% de sus
trabajadores experimentará un desarrollo económico mucho más rápido, y una
élite inconmensurablemente más rica de lo que hubiera sido posible de otro
modo. Que los estadounidenses afirmen hoy que las naciones en desarrollo están
construyendo sus economías "a costa de sus trabajadores", no sólo es
indicativo de una enorme ignorancia, sino que constituye una abominable
hipocresía. Son los estadounidenses quienes construyeron su supremacía
económica literalmente sobre las espaldas de los esclavos y de los pobres.
La
historia de la esclavitud ha sido hábilmente reescrita como una cuestión moral,
pero fue principalmente económica, no moral, siendo su existencia en los EE.UU.
absolutamente indispensable para el desarrollo de la riqueza de la clase
dirigente estadounidense. La contribución financiera de la esclavitud a las
fortunas personales de los políticos, las élites y los banqueros
estadounidenses es incalculable, al igual que su contribución al auge
financiero de Estados Unidos en su conjunto. Los beneficios derivados de la
trata de esclavos en el Atlántico condujeron directamente al auge del
capitalismo industrial estadounidense y al sistema de explotación mundial del
imperialismo norteamericano. A ambos lados del Atlántico, fueron principalmente
los enormes beneficios del comercio de esclavos los que propiciaron y
financiaron la Revolución Industrial.
La
omnipresente esclavitud no sólo fue esencial para el desarrollo económico
estadounidense, sino que fue el indicador más importante de la filosofía y la
estructura de la forma occidental de capitalismo y de la violencia inherente a
ese sistema. Más de un autor ha señalado que la esclavitud no sólo impulsó la
economía estadounidense durante cientos de años, sino que "dio forma a
todos los aspectos cruciales de la economía y la política" de Estados
Unidos. Edward Baptist, al que me refiero más adelante, afirmó muy bien que lo
que yo llamo "historiadores de Photoshop" describen el gran auge
económico de Estados Unidos en términos de "empresarios, creatividad,
invención", cuando la amarga verdad es que fue el resultado casi en su
totalidad de la esclavitud, la colonización brutal y la distribución generalizada
de la violencia organizada contra los pueblos más débiles, y no fue en ningún
sentido una búsqueda de la libertad y la oportunidad, sino del dinero y el
beneficio.
En
una demanda actual de los nativos del Caribe (79) (80) (81), se alega que
sólo Gran Bretaña se benefició hasta en 4 o 5 billones de libras esterlinas de
su participación en la trata de esclavos; el beneficio para la nueva América
habría sido mucho mayor. Las demandas serán en gran medida simbólicas, ya que
las partes responsables ya han rechazado -por motivos esencialmente morales y
lógicos- cualquier esperanza de compensación. El Ministerio de Asuntos
Exteriores del Reino Unido dijo: "No vemos las reparaciones como la
respuesta". Qué sorpresa. Francia se basó en la inutilidad de calcular los
costes, con la lógica aparente de que, como no podemos calcular con precisión,
no nos molestaremos en hacerlo, ahorrándonos así billones de dólares. El
gobierno holandés tuvo más tacto, ya que "ha expresado su profundo pesar
por la historia de la esclavitud y ha reconocido así las injusticias del
pasado". Traducción: nuestra pequeña y amable disculpa es todo lo que
conseguiréis. Pero esta gente tiene motivos para preocuparse. El Caribe es, con
mucho, la parte más pequeña de estas ganancias (o pérdidas), pero varios
economistas y matemáticos han hecho esfuerzos sinceros para estimar sus
pérdidas reales, e incluso bajo cálculos conservadores, dijeron que la cifra
era "tan astronómica que casi no tiene sentido". Y, por supuesto,
esas cifras astronómicas sin sentido son precisamente las ganancias para el
desarrollo económico de Estados Unidos y Europa, cuyas cifras serían casi
infinitamente más altas. Un profesor estadounidense estimó que el beneficio
financiero mínimo para la élite gobernante de EE.UU. sería de varias decenas de
billones, y eso en dólares de 1800 o 1850.
Un
excelente libro reciente que profundiza en los aspectos financieros de la
esclavitud es "La mitad que nunca se ha contado: La esclavitud y la
formación del capitalismo americano", de Edward Baptist (82) (83) (84) (84a). Baptist
consigue exponer la esclavitud como una parte fundamental de la economía
estadounidense en lugar de ser, como alguien escribió, "una nota a pie de
página de una narrativa dominante de la expansión de la libertad". En
realidad, la "libertad" no aparece en ninguna parte de esta ecuación,
siendo la imaginaria "búsqueda de libertad y oportunidades" de los
colonos, sin duda, la parte más engañosa de la historia estadounidense. Como
relata Baptist, toda la industria financiera de las Américas se desarrolló en
torno a la economía de la esclavitud. Los banqueros desarrollaron generaciones
de nuevos instrumentos financieros, creando valores financieros como bonos con
esclavos como garantía, y muchas variedades de hipotecas con intereses sobre
los esclavos que se agrupaban y vendían a los inversores de forma muy parecida
a las hipotecas de las casas de hoy en día. Estos paquetes de instrumentos
financieros que utilizaban a los seres humanos esclavizados como garantía se
utilizaban habitualmente para conseguir dinero para la compra de tierras u
otras inversiones, y se vendían ampliamente a los inversores ricos, tanto en
América como en Europa, siendo una de las formas más disponibles y populares de
inversión en valores.
Después
de que los Rothschild forzaran su legislación a través del Congreso de los
Estados Unidos para la fundación de un banco central de propiedad privada, su
"Banco de los Estados Unidos" se dedicó en gran medida a utilizar
fondos federales para financiar a los traficantes de esclavos, siendo ésta una
de las principales fuentes de acumulación de riqueza del banco. Fue el Barings
Bank, propiedad de los Rothschild, el que financió la mayor parte de la trata
de esclavos originada en Europa (85); los Rothschild y otros banqueros y financieros
aportaron el enorme capital necesario para financiar miles de barcos, cientos
de miles de viajes de trata de esclavos y la compra de decenas de millones de
esclavos con garantía. Los propietarios estadounidenses de esclavos poseían la
mayor reserva de garantías de los Estados Unidos, y estos miles de millones de
dólares constituían hasta el 25% de toda la riqueza del Nuevo Mundo, y como
señaló Baptist, "la parte más líquida de esa riqueza era gracias a la
eficacia de los mercados gestionados por los traficantes profesionales de
esclavos". Y de banqueros profesionales. En aquella época, probablemente
no había negocio en el mundo más rentable que el comercio de esclavos o su
financiación.
Sería útil dar unos pasos hacia atrás (o hacia un
lado) para añadir algo del contexto histórico a este asunto. La esclavitud no
comenzó con el secuestro de negros en África, que en realidad fue un hecho
reciente. Los traficantes judíos de esclavos estaban activos en Europa hace
1.000 años, y de hecho la palabra esclavo deriva de "eslavo", siendo
los blancos cristianos de Europa Central y Oriental los primeros grupos humanos
en ser secuestrados y vendidos, principalmente a países musulmanes, donde las
mujeres blancas eran apreciadas por su sexo y los hombres castrados alcanzaban
precios muy altos como eunucos para los harenes. La mayoría de los europeos
estaban amargamente resentidos por ese tráfico de cristianos blancos, y fue a
menudo por esta razón (así como por el cultivo de impuestos y otros ultrajes) que
los judíos fueron tan a menudo expulsados de varios países europeos, y no
debido al "antisemitismo" como la versión popular nos quiere hacer
creer. (86) (87)
Pero
cuando estas prácticas se desvanecieron, fueron los judíos europeos liderados
por los Rothschild los que formaron la Compañía Británica de las Indias
Orientales, que fue en su momento la mayor corporación del mundo y que
construyó un ejército privado permanente de alrededor de un millón de hombres
con el único propósito de tratar con brutalidad a la población india. (88) (89) (90) (91) (92) (93) (94) Entre la
letanía de atrocidades que este grupo infligió a la India se encuentra la
iniciación de la esclavitud a gran escala, con la captura de millones de indios
que fueron exportados como esclavos a todo el mundo, una práctica que pronto se
trasladó a China. Los Rothschild concibieron la idea de cultivar opio en la
India como forma de drenar la plata de China, momento en el que vastas áreas de
la agricultura india fueron reconvertidas de alimentos a amapolas de opio,
convirtiendo a un gran número de indios en cadáveres en el proceso. El opio se
enviaba entonces a China, donde otro judío, David Sassoon, tenía la franquicia
exclusiva del opio concedida por la propia reina Victoria. No es muy conocido,
y lo trataré extensamente más adelante, pero la farsa del opio durante 150 años
en China fue enteramente un negocio judío del que hoy se culpa astutamente a
los ingleses. Estos traficantes de drogas pueden haber llevado pasaportes
británicos, pero no eran ingleses (95) (96) (97. La Enciclopedia Judía de 1905 afirma que Sassoon
expandió su comercio de opio a China y a Japón, colocando a sus ocho hijos a
cargo de los diversos intercambios de opio más importantes en China. La
Enciclopedia Judía de 1944 afirma que "sólo empleó a judíos en su
negocio... Importó familias enteras de compañeros judíos ... y los puso a
trabajar". Los Sassoon no eran los únicos judíos involucrados en el
comercio, Sassoon compartía una pequeña parte de China con algunas otras
familias judías, Hartung, Hardoon, Kadoorie, Arnold, Abraham, Ezra y Solomon,
entre otros.
Fue
interesante que The Economist, que de todos modos es un periódico decididamente
deshonesto y poco fiable, escribiera una canción de alabanza para la Compañía
de las Indias Orientales con el lema de "la mayor compañía estatal"
de todas, olvidando de algún modo el saqueo y la destrucción total de la India,
las masacres interminables, el opio, y el primer gran cártel de la droga del
mundo. Es probable que no haya ninguna organización en la historia con tanta
suciedad y sangre en sus manos como la Compañía Británica de las Indias
Orientales y, sin embargo, The Economist se esforzó por dar glamour a esta
abominación. A continuación nos dirán que Cecil Rhodes era un hombre de paz y
que las guerras de los bóers no se libraron por los diamantes y el oro, sino
por la libertad. Nick Robins, en su artículo sobre la Compañía Británica de las
Indias Orientales, escribió: "... para muchos indios, fue el saqueo de la
Compañía lo que primero desindustrializó su país y luego proporcionó la
financiación que alimentó la propia revolución industrial británica. En
esencia, la Honorable Compañía de las Indias Orientales encontró rica a la
India y la dejó pobre”.
La
huida de la Compañía de las Indias Orientales les permite a los británicos
pasar por alto el origen de gran parte de su actual riqueza y considerar la
continua pobreza de la India como un producto de su cultura y su “clima",
y no como el trágico resultado de las inhumanas aventuras de un pequeño grupo
de despiadados depredadores extranjeros en busca de beneficios. Los libros de
historia de la Compañía de las Indias Orientales y de su hermana, la Compañía
Holandesa de las Indias Orientales, se cerraron hace mucho tiempo, pero deben
volver a abrirse para que el mundo examine su contenido, que sin duda
documentará uno de los episodios más profundamente malignos de toda la historia
del mundo.
En
aquella época, Sassoon era reconocido como el segundo judío más rico del mundo,
después de Rothschild, con una fortuna que ascendía a miles de millones en
1850. Este es un buen lugar para echar por tierra la tonta leyenda urbana de
que gente como Bill Gates o Warren Buffett son los hombres más ricos del mundo.
Los Rothschild y los Sassoon eran multimillonarios hace 175 años y esas
fortunas se han disparado desde entonces, siendo la estimación más fiable que
estas y otras familias judías europeas tienen hoy activos por valor de
billones, y los Rothschild estimados conservadoramente en unos 25 o 30
billones. Wikipedia, mintiendo como siempre, nos dice que los Rothschild fueron
una vez ricos, pero que distribuyeron esa riqueza entre sus demasiados hijos,
dejando a la familia prácticamente empobrecida. Eso es una tontería, ya que una
sola partida -los varios billones de deuda del gobierno estadounidense que se
deben a la FED- acabará en los bolsillos de los propietarios de la FED
-Rothschild y algunos de sus amigos más cercanos, que también controlan los
Bancos Centrales de Alemania, Inglaterra... En comparación con las familias bancarias
judías europeas, Gates y Buffett son calderilla.
Al
cabo de 50 años, Sassoon y algunas otras familias judías dedicadas al opio eran
dueñas de la mayor parte de Shanghai, así como de muchas otras cosas, y el gran
hotel Península de Hong Kong, que creo que sigue siendo propiedad de la familia
Kadoorie, se financiaba con el dinero del opio procedente del continente. La
razón por la que la reina Victoria arrebató Hong Kong a China fue que Sassoon
necesitaba una base de distribución para su vasta franquicia de opio. Del mismo
modo, el HSBC se fundó únicamente para blanquear el dinero del narcotráfico de
Sassoon, una experiencia en la que el banco sigue especializándose hoy en día.
La narrativa estándar nos dice que el HSBC fue fundado por el escocés Sir Thomas
Sutherland, que quería un banco que operara según "los sólidos principios
bancarios escoceses", pero eso es un Photoshop histórico. El HSBC siempre
fue un banco judío y David Sassoon fue el presidente del consejo de
administración desde su fundación.
En
cualquier caso, los esfuerzos de esclavitud de los Rothschild en la India se
trasladaron pronto a China, con millones de chinos secuestrados y vendidos como
esclavos en todo el mundo, más o menos coincidiendo con el comercio africano
hacia las Nuevas Américas. El número de chinos secuestrados para este comercio
de esclavos en la provincia de Fujian fue tan grande que provocó una rebelión
generalizada y violenta, que obligó a los traficantes de esclavos judíos a
retirarse y reiniciar sus secuestros en Macao y Guangdong. Sólo la guerra
mundial moderó finalmente esta práctica.
Pero
hay que señalar que el comercio mundial de esclavos ha sido casi siempre un
negocio principalmente judío. No es necesario que defienda el tratado aquí,
pero baste por ahora decir que muchas docenas de historiadores judíos han
confirmado estos hechos ampliamente, y gran parte del registro histórico es
indiscutible. En el comercio de esclavos de América del Norte, los judíos no
tenían necesariamente ni en todo momento el monopolio, pero ciertamente eran
muy prominentes y, en la mayoría de los casos, muy mayoritarios. Esto es cierto
no sólo en lo que se refiere a los barcos, los secuestros, las ventas y la
propiedad de los esclavos, sino que la financiación y la titularidad de los
esclavos con garantía es en su mayor parte el mérito de ingeniosos banqueros
judíos a ambos lados del Atlántico.
El
historiador judío Seymour Liebman escribió: "El tráfico de esclavos
[ingleses] era un monopolio real, y los judíos eran a menudo designados como agentes
de la Corona en su venta... [Ellos] eran los mayores proveedores de barcos en
toda la región del Caribe, donde el negocio naviero era principalmente una
empresa judía.... Los barcos no sólo eran de propiedad judía, sino que estaban
tripulados por judíos y navegaban bajo el mando de capitanes judíos". (New
World Jewry 1493-1825: Réquiem por los olvidados, KTAV, Nueva York, 1982). (99) (100) (101) (102) (103)
En
la década de 1850, un inmigrante judío llamado Mayer Lehman obtuvo un
nombramiento por parte del Gobernador para ser efectivamente el Ministro del
Algodón, a cargo y control de toda la industria del algodón en Alabama, lo que
también le puso a cargo de todos los esclavos del estado. Lehman y su familia
generaron una riqueza tan enorme gracias a sus negocios con los esclavos y el
algodón, que se trasladaron a Nueva York y fundaron el banco de inversiones
Lehman Brothers. (104) (105) (106) (107) Hay muchas historias documentadas similares. La
Enciclopedia Judía afirma: "Las plantaciones de algodón en muchas partes
del Sur estaban totalmente en manos de los judíos", y Roberta Feurlicht,
en su libro “El Destino de los Judíos”, escribió: "No sólo había un número
desproporcionado de judíos propietarios de esclavos, comerciantes de esclavos y
subastadores de esclavos, sino que cuando se trazó la línea entre las razas,
estaban en el lado blanco".
Varios
autores han tomado nota de lo que yo llamo "Photoshop histórico", en
el que los llamados "historiadores" contaminan el ambiente con
cuentos de que la esclavitud era económicamente ineficiente y que en realidad
sólo se trataba de que unos pocos tuvieran sirvientes privados y fueran
"el señor de la mansión", o que el enorme aumento de la recolección
de algodón no se debió a las presiones cada vez más brutales ejercidas sobre
las espaldas de los esclavos, sino a la aparición de nuevas cepas de algodón
que casi se recogían solas. Algunos afirman que la esclavitud se oponía en
realidad al capitalismo y era en realidad una especie de caridad que
"salvaba a los esclavos de su propia barbarie innata". Baptist
escribió que la economía estadounidense se construyó enteramente sobre
"innumerables actos individuales de crueldad", y eso es precisamente
correcto. Dijo: "La idea de que la mercantilización y el sufrimiento y el
trabajo forzado de los afroamericanos es lo que hizo a Estados Unidos poderoso
y rico, no es una idea que la gente esté necesariamente contenta de escuchar.
Sin embargo, es la verdad". Y es la verdad.
Kimberly
Palmer escribió una reseña del libro de Baptist en el Washington Times, en la
que decía: (108)
"Baptist
desmonta los mitos que nuestra sociedad ha creado para que nos sintamos más
cómodos con nuestro pasado esclavista. Comienza con el mayor mito de todos: que
la esclavitud no era rentable, que era ineficiente y que acabaría
desapareciendo al no poder adaptarse ni competir con la industrialización.
Desgraciadamente, no hay absolutamente ninguna prueba de que fuera ineficiente
o de que se estuviera extinguiendo. Por el contrario, la disponibilidad barata
y fácil de tierras robadas y el crédito fácil debido a los instrumentos
financieros creativos, combinados con la mano de obra esclava que las leyes
permitían, fomentaban y protegían, condujeron a un auge en la producción de
algodón que mostraba pocos signos de desaceleración hacia 1860. En 1860, los
campos de trabajo de esclavos del Sur proporcionaban el 88% del algodón utilizado
en las fábricas de algodón de Gran Bretaña. El algodón se había convertido en
el producto comercial número uno de todo el mundo. Impulsó la revolución
industrial, alimentando no sólo las fábricas de algodón de Gran Bretaña, sino
también las de ciudades como Lowell y Massachusetts. Las fábricas de algodón de
Lowell se construyeron con los beneficios obtenidos del trabajo no remunerado
de los afroamericanos en los campos de trabajo de esclavos. El algodón pasó de
representar el 14% del total de las exportaciones estadounidenses en 1802 al
61% en 1860. La cuota de Estados Unidos en el mercado mundial del algodón pasó
del uno por ciento en 1801 al 66 por ciento en 1860". Yo añadiría que este
aumento de la cuota de mercado mundial de cero a dos tercios se debió enteramente
al efecto Sam Walton: no pagarles nada y apoderarse del mundo.
El
propio Baptist escribió en un artículo en Salon:
"Seguimos
mintiendo sobre la esclavitud... la verdad sobre cómo la economía y el poder
estadounidenses se construyeron sobre la migración forzada y la tortura. Todas
estas décadas después, nuestros libros de historia están llenos de mitos y
falsedades. Es hora de hacer un verdadero ajuste de cuentas... los
historiadores de la generación de Woodrow Wilson imprimieron el sello de la investigación
académica a la idea de que la esclavitud estaba separada de las grandes
transformaciones económicas y sociales del mundo occidental durante el siglo
XIX. Sobre todo, los historiadores de una nación blanca reunificada insistieron
en que la esclavitud era una institución premoderna que no estaba comprometida
con la búsqueda de beneficios. Esta perspectiva implica... que la esclavitud y
los afroamericanos esclavizados tuvieron poca influencia a largo plazo en el
auge de Estados Unidos durante el siglo XIX, un periodo en el que la nación
pasó de ser un socio comercial europeo menor a convertirse en la mayor economía
del mundo.
...
lo peor de la esclavitud como experiencia, se dice, fue que negó a los
afroamericanos esclavizados los derechos liberales y la subjetividad liberal de
los ciudadanos modernos. Hizo esas cosas como algo natural, y como injusticia,
esa negación se encuentra entre las más grandes de la historia moderna. Pero la
esclavitud también mató a gente, en gran número. A los que sobrevivieron, se
les robó todo. Sin embargo, la ingeniería masiva y cruel necesaria para
arrancar a un millón de personas de sus hogares, conducirlas brutalmente a
nuevos lugares plagados de enfermedades, y hacerlas vivir en el terror y el
hambre mientras se construía y reconstruía continuamente un imperio generador
de mercancías, se desvaneció en la historia de una esclavitud que supuestamente
se centraba principalmente no en producir beneficios, sino en mantener su
estatus de élite cuasi-feudal, o en producir ideas modernas sobre la raza para
mantener la unidad blanca y el poder de la élite. Y una vez minimizada la
violencia de la esclavitud, otra voz podía susurrar diciendo que a los
afroamericanos, tanto antes como después de la emancipación, se les negaban los
derechos de ciudadanos porque no luchaban por ellos." (Salon; 7 de
septiembre de 2014) (109)
En
Counterpunch, en un artículo del 31 de diciembre de 2015, Ron Jacobs escribió
una reseña del libro “La Costa Americana de los Esclavos”, de Ned y Constance
Sublette, que dice:
"describe
una nación fundada en el genocidio y mantenida por una economía basada casi por
completo en el comercio de esclavos". Escribió: "La historia de los
Estados Unidos está empapada de sangre. Y lo que es más importante, ninguna
otra nación ha basado su economía en la compra, venta y cría de seres humanos
que los Estados Unidos. Las decisiones que se tomaron en este modo de
funcionamiento estaban impregnadas de racismo y basadas en la codicia. Sin
embargo, la característica que la define es la búsqueda del beneficio. La
legislación más importante se analizaba a través del prisma de cómo afectaría
al capital humano en manos de los esclavistas.
[El
libro es] más que una discusión sobre la economía de la esclavitud en
Norteamérica. Es también un catálogo de la brutalidad, la violación, el abuso
sexual, el secuestro y una multitud de otros horrores asociados a la
esclavitud. No había esclavistas humanos; el propio acto de poseer a otro ser
humano es inhumano. La estructura de la esclavitud que se construyó en Estados
Unidos -una estructura que criaba intencionadamente a seres humanos para
venderlos por su trabajo en lo que esperaban que fuera una situación
permanente- va más allá de cualquier definición de inhumano. Un hecho que este
libro deja claro es que cualquiera que estuviera involucrado en los mercados
financieros o en el comercio interestatal en los Estados Unidos estaba también
involucrado en la industria de la propiedad, la cría y el comercio de esclavos.
Prácticamente no había forma de evitar esa complicidad, dada la centralización
del sistema de los esclavistas en la economía estadounidense. De hecho, al
menos algunas de las fortunas actuales se hicieron con la compra y venta de
seres humanos". (110) (111)
Gracias
a los medios de comunicación, a los llamados historiadores y a la connivencia
voluntaria de los editores de libros de historia, la mayoría de los
estadounidenses subestiman mucho la proporción de la población esclava en
América. En todos los estados americanos, los esclavos constituían al menos el
25% de la población y en muchos estados superaban el 60%, el elevado número de
esclavos blancos y nativos parece no haber sido contabilizado -o excluido
conscientemente- en muchos estudios. Dado que las mujeres blancas rara vez se
empleaban fuera del hogar y que todos los esclavos, incluidos los niños,
realizaban trabajos forzados, habrían constituido el grueso de la población
trabajadora en muchos estados. La carga de trabajo de 18 horas y el duro trato
que recibían a menudo se traducía en una vida de sólo cinco o diez años, pero
los esclavos, especialmente los blancos, podían ser sustituidos a bajo coste, y
las niñas y mujeres esclavas eran regularmente preñadas a la fuerza a partir de
los 10 o 12 años para producir al menos varios hijos cada una, que también se
convertirían en esclavos, aumentando así la mano de obra sin coste adicional.
No
fue sólo la esclavitud negra la que contribuyó a la formación de la riqueza
americana; también hubo un importante comercio de esclavos blancos,
principalmente irlandeses que fueron enviados a EE.UU., y de nativos americanos
que fueron esclavizados por los colonos, así como enviados como esclavos a
Europa. Además, hubo millones de chinos e indios que fueron secuestrados y
vendidos como esclavos en todo EE.UU. y América Latina por los mismos
traficantes de esclavos. La verdad es que casi inmediatamente después del
descubrimiento del Nuevo Mundo, Colón y otros traficantes de esclavos judíos
empezaron a capturar y enviar a un gran número de nativos a los mercados de esclavos
europeos. Los libros de historia de Estados Unidos omiten esta información
porque entra en conflicto con la versión Disney de una América parecida a
Bambi, poblada por una vasta migración de pueblos oprimidos en busca de
libertad y oportunidades. Los historiadores estadounidenses y el gobierno de
Estados Unidos siguen negándose rotundamente a afrontar la dura verdad de los
beneficios financieros de la esclavitud para la población de la élite blanca y
para el desarrollo económico de la nación.
La
maquinaria propagandística nos dice que Estados Unidos era una colonia fundada
sobre los principios de la libertad religiosa y la tolerancia. Pero en la
historia moderna de Estados Unidos, la esclavitud estaba muy claramente
relacionada con la búsqueda de la supremacía económica, política y cultural de
Estados Unidos. Incluso los primeros barcos que llegaron a América, ya en el
siglo XVI, transportaban esclavos para el mercado local. Muchos historiadores
estiman que al menos 20 millones de africanos fueron secuestrados y
transportados a Estados Unidos para el mercado local y hemisférico de esclavos,
y si tenemos en cuenta la cifra generalmente aceptada de que sólo un 10% de los
negros secuestrados sobrevivieron para llegar a América, eso representa quizás
200 millones de muertos. Los valores morales que produjeron la trata de
esclavos, la colonización y el imperialismo estaban tan arraigados en la psique
judeocristiana que persistieron esencialmente sin cambios durante siglos y no
han desaparecido en absoluto hasta nuestros días.
La
esclavitud fue supuestamente abolida a finales de la década de 1860, pero
continuó de otras formas, y durante otros 100 años hubo una enorme reacción
contra los negros que se tradujo en terrorismo, ahorcamientos e innumerables
leyes destinadas a impedir la competencia económica y política de los negros.
La esclavitud estadounidense se basaba en un rígido sentido religioso de la
jerarquía de las clases sociales; casi la mitad de las familias del sur de
Estados Unidos poseían esclavos, y su posición económica, política y social
dependía de la posesión de esclavos. La mayoría de ellos seguían rígidamente
formas duras de judaísmo o de cristianismo evangélico, y justificaban su
participación en la esclavitud con oscuras y falsas referencias a los relatos
bíblicos, especialmente a las teorías judías y cristianas sobre la inferioridad
básica de los negros, y con afirmaciones de que todas las grandes
civilizaciones del pasado practicaban la esclavitud. Muchos también intentaron
imponer a sus esclavos sus versiones deformadas de la religión como medio de
control de la población.
Según
un historiador, los negros eran "ahorcados, quemados, golpeados,
torturados, asesinados, azotados, descuartizados por carniceros humanos que
cortaban y destrozaban a los esclavos de forma espantosa en las ocasiones más
insignificantes, y en conjunto los trataban en todos los sentidos como
bestias". Solían "introducir clavos en un barril para dejar la punta
del clavo justo en el interior del barril. Luego metían a un esclavo en el
barril, clavaban la tapa y lo hacían rodar por una colina muy larga y
empinada". Los dueños de los esclavos los azotaban hasta la muerte, hasta
que no eran más que una masa de sangre y carne cruda, sin pensar más en ellos
que en la muerte de un perro. Un autor citó el diario personal de un hombre
llamado Thomas Thistlewood, que era capataz de una plantación en EE.UU., y que
describe cómo golpeaban a sus esclavos y les introducían heces y orina en la
boca. Un propietario de esclavos dijo a un visitante: "Algunos negros
están decididos a no dejar que un hombre blanco los azote y se resistirán
cuando lo intente; por supuesto, en ese caso hay que matarlos". El abuso
físico y sexual de los esclavos era ampliamente aceptado y se hacía abiertamente.
Las esclavas eran violadas regularmente por sus amos y ofrecidas como regalo a
los amigos que los visitaban. Fergus Bordewich, en un artículo del Wall Street
Journal, escribió: "Aunque la gran mayoría del "stock humano" de
la compañía acababa en los campos de algodón, muchas hembras, mulatas
atractivas en particular, eran destinadas a la prostitución". En una de
las varias cartas que cita el Sr. Baptist, un socio mayoritario de la empresa,
sugiere con toda naturalidad que dos mujeres que había comprado recientemente
"podrían amortizarse pronto manteniendo un prostíbulo... para beneficio
exclusivo de la empresa y de sus agentes aliados".
Las
historias de la inmensa y despiadada crueldad hecha por los blancos
estadounidenses a sus esclavos negros, le harían encoger de horror ante el
inhumano salvajismo de todo ello, pero los estadounidenses han sido tan
eficazmente abrumados por el mito y la ideología como para insistir
obstinadamente en que su país fue fundado en los valores cristianos, en la
libertad y los derechos humanos. La congresista judía-estadounidense Michele
Bachman hizo la increíblemente estúpida afirmación de que la esclavitud de los
negros no era tan mala, porque daba a los niños la oportunidad de crecer en un
"entorno familiar", ignorando convenientemente los hechos de que (1)
la separación familiar era intrínseca al proceso de esclavitud, y (2) a los
esclavos no se les permitía casarse, por lo que la descendencia de las mujeres
negras era generalmente el resultado de la violación por parte de los amos
blancos. Eso no es exactamente un entorno familiar, Michelle, pero gracias por
la contribución.
Los
estadounidenses le dirán que la 13ª Enmienda de la Constitución de EE.UU. puso
a la nación en un nuevo curso moralmente correcto al prohibir la esclavitud,
pero esa afirmación es falsa. La esclavitud nunca fue abolida en los Estados
Unidos. La 13ª Enmienda establece claramente que la esclavitud y la servidumbre
involuntaria son permisibles "como castigo por delitos", y eso lo
dice todo. Después de esta enmienda, la esclavitud continuó en Estados Unidos
como antes, pero con una estructura modificada. Antes de esto, los negros, los
blancos y los indios nativos eran propiedad de sus amos; después de la
enmienda, eran criminales libres que eran castigados por crímenes, la única
diferencia útil era el cambio de nombre. Inmediatamente después de la concesión
de su "libertad", esas mismas personas eran acorraladas como
criminales y colocadas en el nuevo sistema de arrendamiento de convictos de la
nación, donde fueron tratadas tan mal como antes. Inmediatamente se aprobaron
nuevas leyes que criminalizaban a los negros y a otros antiguos esclavos y
permitían su reinserción en la esclavitud. Estos supuestos delitos estaban a
menudo tan vagamente definidos como para ser universales, al igual que su
aplicación caprichosa y arbitraria. El robo de un objeto de valor inferior a un
dólar se traducía en una pena de prisión de cinco años. Para los negros y los
antiguos esclavos, la vagancia era un delito, al igual que el "vagabundeo".
Mirar a una mujer blanca era un delito, poseer una insuficiente identificación
o prueba de empleo suponía una pena de prisión, al igual que tener una deuda o
"caminar como un negro". Casi a diario se inventaban otros delitos
para justificar el acorralamiento de los negros -y de muchos de los pobres- en
lo que podía ser una vida de esclavitud. Las leyes permitían a la policía
"acorralar a los negros ociosos en tiempos de escasez de mano de
obra", proporcionando a los empresarios las herramientas legales para
impedir que estos trabajadores esclavos salieran del sistema.
La tercera parte de la sexta contendrá: Trabajo y robo de salarios
Crédito de la imagen: https://www.chinadaily.com.cn/a/202109/17/WS6143dbbda310e0e3a6822281.html
*
Los escritos del Sr. Romanoff se han traducido a 32 idiomas y sus artículos se han publicado en más de 150 sitios web de noticias y política en más de 30 países, así como en más de 100 plataformas en inglés. Larry Romanoff es consultor de gestión y empresario jubilado. Ha ocupado cargos ejecutivos de alto nivel en empresas de consultoría internacionales y ha sido propietario de un negocio de importación y exportación internacional. Ha sido profesor visitante en la Universidad Fudan de Shanghai, presentando estudios de casos en asuntos internacionales a las clases superiores del EMBA. El Sr. Romanoff vive en Shanghai y actualmente está escribiendo una serie de diez libros relacionados generalmente con China y Occidente. Es uno de los autores que contribuyen a la nueva antología de Cynthia McKinney “When China Sneezes (Cuando China Estornuda — Cap. 2 — Tratar con Demonios)”.
Su archivo completo puede verse en
https://www.moonofshanghai.com/
http://www.bluemoonofshanghai.com/
Puede ser contactado en: 2186604556@qq.com
*
Notas:
(1) https://www.stetson.edu/artsci/political-science/media/clash.pdf
(3) https://medium.com/dan-sanchez/the-dulles-brothers-and-their-legacy-of-perpetual-war-94191c41a653
(4) https://medium.com/dan-sanchez/the-dulles-brothers-and-their-legacy-of-perpetual-war-94191c41a653
(5) https://ahrp.org/the-brothers-john-foster-dulles-allen-dulles/
(6) https://hbr.org/podcast/2019/07/the-controversial-history-of-united-fruit
(7) https://historyhustle.com/united-fruit-company/
(8) https://www.worldatlas.com/articles/what-is-the-significance-of-the-united-fruit-company.html
(9) https://allthatsinteresting.com/banana-wars
(10) https://en.wikipedia.org/wiki/1973_Chilean_coup_d%27%C3%A9tat
(11) https://en.wikipedia.org/wiki/ITT_Inc.
(12) https://en.wikipedia.org/wiki/Salvador_Allende
(14) http://www.historyisaweapon.com/defcon2/militarydictatorshipsintheamericas.html
Iran Oil
(17) Britain and France controlled Iran oil
(18) https://archive.nytimes.com/www.nytimes.com/library/world/mideast/041600iran-cia-chapter1.html
(20) https://nationalinterest.org/blog/buzz/world-war-ii-fact-1941-russia-and-britain-invaded-iran-61467
Iran coup
(21) https://socialistworker.co.uk/art/50518/Iran+1953+Britains+role+in+coup+for+oil+and+profit
(22) http://libcom.org/history/iranian-coup-1953
(23) https://www.iranchamber.com/history/coup53/coup53p1.php
(24) https://www.newworldencyclopedia.org/entry/1953_Iranian_coup_d%27%C3%A9tat
(26) https://archive.nytimes.com/www.nytimes.com/library/world/mideast/041600iran-coup-timeline.html
Zaire
(28) https://fpif.org/zairedemocratic_republic_of_the_congo/
(29) https://en.wikipedia.org/wiki/CIA_activities_in_the_Democratic_Republic_of_the_Congo
(30) http://www.huppi.com/kangaroo/CIAtimeline.html
President Wilson
(31) https://socialistworker.org/2008/12/02/imperialism-the-highest-stage-of-capitalism
Philip Agee
(32) https://www.democraticunderground.com/discuss/duboard.php?az=view_all&address=389x5205337
(33) https://www.amazon.ca/Inside-Company-Diary-Philip-Agee/dp/0883730286
Kory
Zinn
(35) https://www.countercurrents.org/zinn020408.htm
Bowman
(36) https://alternativesmagazine.com/28/bowman.html
(37) http://www.thirdworldtraveler.com/Sept_11_2001/Security_Charade.html
Edward S. Herman - the establishment can't admit [that] it is human rights violations
(38) https://citatis.com/a36085/17e281/
(39) http://www.thirdworldtraveler.com/Human_Rights/HRCharade_Herman.html
(40) https://citatis.com/a36085/37dd56/
(41) http://thirdworldtraveler.com/Insurgency_Revolution/Intervention_Revolution.html
Michael Parenti
(42) https://thirdworldtraveler.com/Militarization_America/Empire_MOW.html
Thomas Friedman
(43) https://www.nytimes.com/1999/03/28/magazine/a-manifesto-for-the-fast-world.html
William Greider
(44) https://citatis.com/a25918/266b63/
President of the American Chamber of Commerce in Guatemala - Why should we worry about the death squads?
(45) https://williamblum.org/chapters/killing-hope/guatemala
Fred Sherwood
(46) https://williamblum.org/chapters/killing-hope/guatemala
Willam Shirer
(47) https://citatis.com/a33134/37c5f1/
Steve Kangas
(48) http://www.iraqtimeline.com/kangas.html
Mexico conference 1945 - eliminate "the scourge of economic nationalism",
(50) http://www.thirdworldtraveler.com/History/Years_Hysteria_TGSNT.html
George Kennan
(51) https://www.counterpunch.org/2012/10/23/envy-and-resentment/
President Obama
(53) http://www.carstenburmeister.com/blog-president-obama-on-the-seven-report.aspx
Susan Reverby
(54) "Normal Exposure" and Inoculation Syphilis: A PHS "Tuskegee" Doctor in Guatemala, 1946-48
Smedley Butler
(55) https://www.ratical.org/ratville/CAH/warisaracket.html
(56) ibid
General David Shoup
(57) https://en.wikipedia.org/wiki/David_M._Shoup
Hawaii
(58) https://www.grunge.com/301935/how-the-united-states-stole-hawaii/
(59) https://www.youtube.com/watch?v=XK2MBnw6RlY
(60) https://www.nlm.nih.gov/nativevoices/timeline/578.html
Japan
Clinton - "uninhibited access to key markets, energy supplies, and strategic resources"
(62) https://www.guernicamag.com/noam-chomsky-the-paranoia-of-the-superrich-and-superpowerful/
(63) https://www.huffpost.com/entry/american-power_b_2615453
(64) https://www.theguardian.com/commentisfree/2013/feb/04/us-control-diminishing-own-world
Panama
(65) https://www.dissentmagazine.org/article/and-just-why-did-we-invade-panama
(66) https://quizlet.com/402921528/american-foreign-policy-flash-cards/
(68) http://pangaea.org/street_children/latin/soa.htm
(69) https://ips-dc.org/us_military_bases_in_latin_america_and_the_caribbean/
Panama CIA drugs
(70) https://en.wikipedia.org/wiki/CIA_involvement_in_Contra_cocaine_trafficking
(71) http://www.darkpolitricks.com/p/cia-involvement-in-drug-smuggling-part-3.html
Haiti
(73) https://www.dailyhistory.org/Why_did_the_United_States_invade_and_occupy_Haiti_from_1915-34
(74) https://www.bibliotecapleyades.net/sociopolitica/sociopol_fulford23.htm
(75) https://en.wikipedia.org/wiki/United_States_occupation_of_Haiti
Guatemala
(76) https://text-message.blogs.archives.gov/2012/02/13/the-cia-in-guatemala/
Libya
Caribbean
(79) https://www.panoramas.pitt.edu/news-and-politics/all-eyes-slavery-reparations-case-caribbean-nations
(80) https://www.huffpost.com/entry/14-caribbean-nations-sue-_n_4018906
(81) https://popularresistance.org/caribbean-nations-sue-europe-over-slavery/
Edward Baptist
(82) https://www.amazon.ca/Half-Has-Never-Been-Told/dp/046500296X
(83) http://www.douglasdecelle.net/the-half-has-never-been-told-summary-and-notes/
(84a) http://edition.cnn.com/2014/09/07/opinion/baptist-slavery-book-panned-economist-review/
Barings Bank
(85) https://www.company-histories.com/Barings-PLC-Company-History.html
Jewish Expulsions
(86) https://fathersmanifesto.net/wm/wm0051a.html
(87) https://www.henrymakow.com/2018/10/the-reasons-for-anti-semitism.html
Rothschild BEIC
(89) https://conspiracy.fandom.com/wiki/Colonization_of_India
(91) https://www.quora.com/Did-the-Rothschilds-invest-in-the-British-East-India-company
(92) https://defence.pk/pdf/threads/the-rothschild-colonization-of-india.598421/
(93) https://divineabodenews.wordpress.com/2014/01/19/who-owned-east-india-company/
(94) https://rense.com/general78/imper.htm
Jewish Opium
(95) https://www.islam-radio.net/islam/english/jewishp/china/jew-opium-monopoly.htm
(96) https://covenersleague.com/culture-heritage/item/1446-jews-and-opium-war-in-china
Jewish Slave Trading
(98) The historical record of the Opium Jews engaging in massive slave-trading in oth India and China, has been severely cleansed, with few traces remaining. The only full historical records exist partially in India and mostly in China - where these truths are well-known, but the references are all in Chinese only. Millions of Chinese were abducted and sold to build the North American railways, the Panama Canal and Panama Railway, the guano mines in Peru, and so much more.
(99) https://exposeintelligence.blogspot.com/2016/03/the-slave-trade-quotes-from-jewish.html
(100) https://davidduke.com/how-long-will-the-jewish-role-in-slavery-be-hidden/
(101) https://fgcp.org/content/slave-traders
(103) https://www.theatlantic.com/magazine/archive/1995/09/slavery-and-the-jews/376462/
Mayer Lehman
(104) https://aaregistry.org/story/mayer-lehman-slave-owner-and-businessman-born/
(105) https://ibw21.org/reparations/the-lehman-trilogy-and-wall-streets-debt-to-slavery/
(106) https://groups.google.com/g/alt.obituaries/c/SaufEb-Pzkw
(107) https://www.haaretz.com/jewish/.premium-this-day-birth-of-a-lehman-brother-1.5306818
Kimberly Palmer
(108) https://www.washingtontimes.com/news/2006/sep/23/20060923-084010-6735r/
Edward Baptist article in Salon, "We still lie about slavery"
Ron Jacobs, Counterpunch, December 31, 2015, The American Slave Coast
(110) https://www.counterpunch.org/2015/04/10/the-black-struggle-against-slavery/
(111) https://www.counterpunch.org/author/ron-jacobs/page/2/
Copyright © Larry Romanoff, Moon of Shanghai, Blue Moon of Shanghai, 2021